Luego de años de haber denunciado al cura abusador y soportado los vaivenes del Poder Judicial, finalmente se dispuso la elevación a juicio de la causa contra Renato Rasjido. 

 

El sacerdote católico está acusado por “abuso sexual simple agravado por ser ministro de culto reconocido”, "abuso simple agravado en tentativa”, "abuso sexual con acceso carnal vía anal, agravado” y por “corrupción de menores”. Pese a la gravedad de las imputaciones, el cura goza de plena libertad y de todos los privilegios que le proporciona el obispo de Catamarca, Luis Urbanc. La madre de la víctima realizó la denuncia en 2014, al tomar conocimiento de que el intento de suicidio de su hijo se debió  a los múltiples ultrajes sufridos.  

 

Todo el armado que buscaba garantizar la impunidad de ese Estado paralelo que representa la Iglesia Católica, ha chocado con una montaña representada por la familia y quienes acompañamos su lucha. Pese a los intentos de soborno y de las más variadas maniobras pergeñadas por la defensa y la propia justicia, hemos avanzado un peldaño más en esta lucha con la elevación a juicio de la causa, siguiendo el método de la movilización independiente.

 

Este es también un avance en la causa contra los curas abusadores en Catamarca, que tiene otro exponente en el cura Juan de Dios Gutiérrez, poniendo de relieve que el único camino es la organización independiente de las mujeres y los familiares que luchan contra la impunidad. 

 

Vamos con la fuerza que nos da este avance al XXXI Encuentro Nacional de Mujeres.

 

Cárcel común a los curas abusadores, a Renato Rasjido y a Juan de Dios Gutiérrez. Separación de la Iglesia del Estado.