Sociedad

10/6/2021

Detienen a una monja en Boulogne por abuso sexual

María Tellez Fajardo o "Sor Marina" fue detenida por abusar a una joven de 14 años en el Hogar Las Hermanas Trinitarias.

María Tellez fajardo o “Sor Marina”, como se la conoce dentro del hogar de las hermanass Trinitarias de Boulogne, fue detenida ayer por la mañana, por “abuso sexual simple agravado, por haber sido cometido por una persona a cargo de la guarda de la víctima” (Infobae).

La víctima es una menor que tenía 14 años cuando ocurrieron los hechos (2020-2021), y es una de las niñas y jóvenes tuteladas por el Estado y con medidas judiciales de abrigo (muchas de ellas provenientes de hogares violentos) que viven en este hogar de Las Hermanas Trinitarias, ubicado en la zona norte del Gran Buenos Aires.

El día de hoy, las religiosas emitieron un comunicado donde expresan “su incondicional apoyo a Sor Marina” y niegan los hechos de abuso. Dejan en evidencia que ya estaban al tanto de las denuncias y por eso trasladaron a Sor Marina a la sede de San Miguel, para que no esté en contacto con la víctima. Sin embargo, siguió desarrollando sus tareas en dicha sede, donde además funciona un Centro de Día para niñes de primaria.

Por otro lado, el Obispado de San Isidro también difundió un comunicado donde menciona otra denuncia realizada en octubre del año pasado, y tratando de protegerse a sí mismos, sostienen que fue la justicia la que no avanzó con la investigación.

Las Hermanas Trinitarias son una orden religiosa que funciona también en España, Uruguay y México. En nuestro país, además de las sedes ubicadas en PBA, dirigen una residencia  para mujeres jóvenes en Nuñez (CABA), donde la mayoría son estudiantes de distintas provincias, recién llegadas a la capital.

El fiscal que se ocupa de la investigación, Marcelo Fuenzalida, no descarta otras víctimas de abuso o incluso otras monjas implicadas. Y lamentablemente, esto no sería una sorpresa.

Recordemos que hace poco más de un mes comenzó el segundo megajuicio por el caso del Instituto Próvolo para niñxs hipoacúsicxs, en Mendoza. Allí ocurrieron al menos 36 abusos a menores, siendo una monja, Kumiko Kosaka, una de las más comprometidas, con denuncias por abusos sexuales simples y agravados, que participaba y hasta “entregaba” niñas a los curas.

Al igual que en este caso de las Hermanas Trinitarias, las acusadas son religiosas y directivas del lugar, existen numerosos casos en nuestro país, y a lo largo de los años, que muestran como la Iglesia se ocupa de tapar denuncias para encubrir y proteger a cientos de curas pedófilos y abusadores. Los juicios suelen tardar años hasta resolver condenas, donde las víctimas y familiares batallan fuertemente contra el poder eclesiástico que goza con recursos inmensos y protección judicial y política.

 

Son las mismas iglesias financiadas por todos los gobiernos que pasan. Las iglesias que dirigen hospitales e institutos educativos con discursos de odio y antiderechos, y que impiden el acceso al derecho a una ESI laica y científica o el acceso a la IVE, garantizada por ley.

Las iglesias que actúan como factores de contención, interviniendo de forma asistencial y demagógica en los barrios donde viven los sectores más golpeados por la pobreza y las políticas de hambre del gobierno fondomonetarista de Alberto Fernández. Mientras tanto, el ministerio de Estela Diaz cogobierna de la mano de esta orientación. El presupuesto para ayudar a niñes y mujeres en situaciones de violencia es nulo, mientras eligen tercerizar la atención y la asistencia de las víctimas en las iglesias católicas y evangélicas, dejándolas en manos de abusadores y abusadoras.

Acompañamos a la víctima en este momento tan duro, reclamamos que se investigue profundamente el caso, y exigimos la separación de las Iglesias del Estado, para que se terminen los encubrimientos y se haga justicia por todas las víctimas de monjas y curas abusadores.