Sociedad

1/7/2010|1135

MUNDIAL DE FÚTBOL

La mano “dura” de la Fifa

A pesar de que en los principales diarios sudafricanos sólo se habla de la buena organización del Mundial, saltan por todos lados denuncias de la actuación brutal de la policía estatal y privada abocada al cuidado del evento.

Se han creado en Sudáfrica 56 tribunales especiales para juzgar casos ocurridos durante el mes del Mmundial. Actúan en ellos 110 jueces, 260 fiscales, 200 traductores y casi 1.500 auxiliares a tal efecto.

Estos jueces están aplicando condenas “ejemplificadoras que tienen el “sello Fifa”, lo que ha generado gran indignación en la propia Sudáfrica. “Las autoridades locales se convirtieron en policía de la Fifa –afirmó un diplomático local. El ejemplo más claro es la sanción de hasta cinco años de cárcel para el comercio ilegal de entradas. Organismos de derechos humanos plantean que se ha montado un estado policial” (Ambito Financiero, 28/6).

La policía desplegó 1.000 agentes en el estadio Ellis Park con motivo del partido Brasil-Corea del Norte, pero no para contener a algún “barra” sino después de que centenares de “controles” protestaran antes del encuentro, con reivindicaciones salariales. Pero a renglón seguido, los vigilantes de la empresa de seguridad privada Stallion también se pusieron en huelga en los estadios mundialistas de Ciudad del Cabo, Durban, Port Elizabeth y Johannesburgo para pedir mejoras salariales. Finalmente, también se unieron a la protesta los trabajadores del estadio de Port Elizabeth y del Ellis Park de Johannesburgo.

“Estamos haciendo esta huelga para que nos ajusten nuestros ingresos, a todos nos pagan diferente. Si trabajás en Soccer City (el principal estadio de este Mundial en Johannesburgo), recibes casi el triple que en Ellis Park”, señaló uno de los guardias” (El Universal, 18/6). La policía reprimió a los huelguistas, luego hizo los controles de las entradas, actuando en el doble papel de represores y carneros.

La Fifa hizo detener, además, a un grupo de 36 jóvenes con minifaldas naranjas acusadas de llevar una vestimenta diseñada por la marca de cerveza holandesa Bavaria, no asociada al Mundial, acusándolas de ‘marketing’ no autorizada, según publicó el diario sudafricano “Star”.

La Fifa está usando la brutal policía sudafricana para salvar los intereses de los sagrados socios de la “entidad madre del fútbol”. Es el Mundial que no se ve.