Universidad

11/5/2017|1457

25 días de toma en la Universidad del Comahue

Presidente de la FUBA


El viernes 5 se cumplieron 25 días desde que trabajadoras de limpieza despedidas ocuparon el decanato de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad del Comahue (Unco). Ese día, la dirección de la Federación Universitaria de Buenos Aires (Fuba) se hizo presente en la sede del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que reúne a los rectores de todas las universidades nacionales; allí presentamos un escrito en el que reclamamos la inmediata reincorporación de las 10 trabajadoras y el fin de la tercerización laboral en la universidad, y rechazamos el ingreso de la policía -que días atrás había intentado desbaratar la toma en la sede de Río Negro-, violatorio de la autonomía universitaria. El texto iba acompañado por la firma de legisladores como Marcelo Ramal y Laura Marrone, parlamentarios porteños


por el Frente de Izquierda.


 


La toma de las trabajadoras de la UNCo pone sobre la mesa una cuestión que afecta a las universidades de todo el país. La tercerización de funciones no docentes, en el caso de las tareas de limpieza, seguridad o mantenimiento, es absolutamente habitual en las casas de estudio, como en otras dependencias estatales. Es la raíz del conflicto que, en estas horas, atraviesa al mismísimo Ministerio de Trabajo de la Nación, sumergido en este fraude laboral. El negocio de la tercerización, que permite amputar derechos laborales y beneficiar a empresas amigas -muchas veces vinculadas a los propios funcionarios-, es moneda común entre rectores y decanos, tanto sean radicales como kirchneristas o “progresistas”.


 


Rápidamente, la toma de las trabajadoras recibió el apoyo y la solidaridad del combativo movimiento obrero, estudiantil y popular de la Patagonia. Se destacó el acompañamiento, entre otros, de los obreros de Zanón, los sindicatos docentes recuperados, organismos de Derechos Humanos y por supuesto de la UJS, el Partido Obrero y el Frente de Izquierda. No fue esa la actitud de la burocracia sindical no docente de Apunc, que no sólo no acompañó a las trabajadoras despedidas sino que, a lo Pedraza, llegó a hacer una contra-toma de la facultad contra la posibilidad de que se termine la tercerización -negocio en el que está involucrada.


 


Durante estos 25 días de ocupación también sesionó el congreso de la federación estudiantil (FUC). La Cepa (PCR) y La Mella, que buscan presentarse como oposición a Franja Morada a nivel nacional, acordaron darse quórum mutuamente en un congreso en el que los primeros se llevaron la conducción en un bloque con el MNR (Partido Socialista), mientras los segundos quedaron en minoría en un bloque con el kirchnerismo. El congreso fue esclarecedor sobre el carácter de estas agrupaciones, ya que, a pesar de haberse realizado en plena ocupación, el 28 de abril, ninguno de los dos bloques propuso redactar una sola línea ni votar acción alguna en apoyo a la lucha de las trabajadoras despedidas. La UJS y otras agrupaciones de izquierda resolvimos retirarnos, y protagonizamos a los pocos días una marcha al Consejo Superior de la Unco.


 


En un comunicado sobre el conflicto, la Cepa afirma que es un error de las trabajadoras reclamar el pase a planta permanente, ya que “el objetivo de terminar con la tercerización es una lucha a mediano-largo plazo”. La agrupación del PCR, que actúa como pata estudiantil de Carlos Alberto Pescader (el decano “progre” de la facultad tomada), justifica la tercerización impuesta por las autoridades debido al “contexto de la política de ajuste del gobierno de Macri”. La realidad es que el fraude laboral viene de muy atrás, y tampoco es cierto que permita ahorrar dinero a la universidad, ya que obliga a la misma a remunerar las ganancias de las empresas negreras. La Cepa culmina presionando a las trabajadoras para que “formen una cooperativa”, incitándolas a aceptar la auto-explotación al margen del


convenio no docente. En esta línea carnera y pro-patronal, reclaman que se retome el “normal desarrollo


de las actividades académicas”.


 


La conclusión de estos 25 días de toma en Comahue es clara: la lucha contra la tercerización laboral en la universidad está a la orden del día. La defensa de las trabajadoras de limpieza de la Unco, de su lucha y sus reclamos, requiere de una federación estudiantil independiente de las autoridades.