Universidad

24/7/2020

500 egresadxs de Psicología-UBA no pueden trabajar porque no les entregan los títulos

Las autoridades no dan respuesta a sus reclamos.

Egresadxs de la Facultad de Psicología denuncian que hay más de 500 títulos que la gestión de la Universidad de Buenos Aires no entrega por la pandemia. Se recibieron y, cuando les iban a entregar el título, el gobierno dictaminó el aislamiento social, preventivo y obligatorio; la respuesta de las autoridades de la facultad fue nula en ese momento y lo es ahora.

Son cinco las cartas que lxs graduadxs de las carreras de Psicología, Musicoterapia y Terapia Ocupacional le mandaron al decano Jorge Biglieri y dos al rector de la UBA, Alberto Barbieri. Sin embargo, no han tenido respuestas en torno al punto. De hecho, la situación se agrava cuando se tiene en cuenta que lo único que se les ha ofrecido a estudiantes y graduadxs es hacer voluntariados sin remuneración, sobre los cuales se denunció la falta de elementos de protección básicos. Da cuenta del abandono que las gestiones han hecho del conjunto de los reclamos de la comunidad educativa desde que se inició la cuarentena -sino antes, porque algunxs de ellxs están esperando sus títulos hace más de un año. Y, por supuesto, se suma al ataque sistemático a docentes y estudiantes en la virtualidad, quienes se ponen en alerta cada vez que la universidad toma un accionar.

No podemos dejar pasar que estamos hablando de 500 títulos de profesionales de la salud en el marco de una pandemia, con pico de casos todos los días y sin una política de salud mental comunitaria para intervenir. Esto, sumado a lo que implica cumplir el aislamiento sin condiciones de vivienda y con una crisis económica y social galopante, da el pie justo para que surjan los llamados “anticuarentena”. La falta de entendimiento de la situación por parte de las autoridades se puede explicar sencillamente: el decano, Biglieri, es un reconocido militante de esta posición. Sus famosos dichos hablan, por ejemplo, de la responsabilidad individual, sin hacer alusión a la responsabilidad sanitaria del Estado. La pregunta es entonces, ¿dónde está la responsabilidad del decano de la Facultad?

A estos dichos se suman sus declaraciones acerca de la esencialidad del trabajo del psicólogx en el Área Metropolitana de Buenos Aires. Ignora, como ya denunciamos en otras oportunidades, la enorme cantidad de trabajadores de la salud mental que se encuentran cumpliendo sus tareas en hospitales y ni hablar de la falta de elementos de protección o del trabajo precarizado que realizan. Tampoco menciona a aquellxs profesionales que son monotributistas y que, en la pandemia, se quedaron sin ingresos, ni denuncia la gran cantidad que se quedó sin acceder al Ingreso Familiar de Emergencia o que los $10 mil ofrecidos están muy por debajo de la canasta básica.

El conjunto de graduadxs denuncia también la responsabilidad de lxs integrantes del Consejo Directivo, entre ellos el Frente de Graduados (kirchnerista) y Convergencia Académica (Franja Morada), quienes nuevamente actúan en conjunto, esta vez a nivel universitario, para ir en dirección opuesta a las necesidades de la comunidad educativa y atacarla.

Mientras la pandemia se agudiza, colapsa el sistema de salud, resultado de años de abandono y desfinanciamiento del sistema sanitario y profundizado por todos los gobiernos habidos. En este contexto, no es gratuito que 500 profesionales de la salud mental se queden sin intervenir en la pandemia, ni tampoco que aquellxs que sí lo hacen estén cumpliendo cargas horarias exhaustivas, sin un salario adecuado ni protección.

Resulta necesaria la intervención por parte de lxs trabajadores con un planteo de fondo: centralización del sistema de salud, Plan Nacional de Emergencia en Salud Mental que establezca una política clara y que se permita trabajar a todxs lxs graduadxs, tan necesarixs en este contexto, garantizándoles salario y jornadas laborales acordes que no impliquen una superexplotación de su fuerza de trabajo y con todas las medidas de seguridad necesarias. Seguro al desocupado por $30.000, aumento del IFE y garantía de acceso a todxs lxs inscriptxs.