Universidad

30/6/2021

CBC Villa 31, una subsede del Vaticano

Las camarillas “reformistas”, la burocracia de Apuba y el ministerio le arman una sede de la UBA a las Scholas Ocurrentes del Papa Francisco.

Las autoridades de la Universidad de Buenos Aires y el Ministerio de Educación acaban de firmar un convenio con la Fundación Scholas Ocurrentes -la organización del Vaticano creada por Bergoglio para inmiscuirse en la educación a nivel global- por medio del cual montan una sede del CBC en la villa 31 y una secundaria a distancia, gestionada por la burocracia nodocente de Apuba.

Todas estas actividades, encuadradas en una universidad formalmente laica, no se desenvolverán en un ámbito propio, sino en la casa central de Scholas, es decir, en sede vaticana. Para su funcionamiento, el ministerio aportará los gastos de infraestructura e insumos informáticos que le niega a docentes y estudiantes.

¿Opción por los pobres?

En declaraciones a Página 12, el rector de la UBA, Alberto Barbieri, presentó el convenio con el Vaticano como una iniciativa para acercarse “a una de las zonas más vulnerables de la Ciudad” (29/6). Resulta sorpresiva la nueva vocación social de las camarillas universitarias, en especial luego de rechazar cualquier ampliación real de las becas universitarias para estudiantes -de ayuda económica o de conectividad.

Lo mismo vale, con respecto a las Conectar, para el ministerio de Educación comandado por Nicolás Trotta. Todos ellos, junto a las burocracias sindicales, son los responsables de pulverizar los salarios de docentes y nodocentes.

Laica o libre

Muy lejos del espíritu de la Reforma del 18 y sus batallas contra las castas clericales, las camarillas de la UBA, que continúan reivindicándose “reformistas”, le han abierto las puertas a la Iglesia Católica hace rato. Pero en esto tampoco han innovado: la Universidad Nacional de Córdoba o la de Hurlingham, del secretario de Políticas Universitarias de Jaime Perczyk, también son cabezas de playa de las Scholas del Papa Francisco.

En este sentido, el anuncio aún mantiene dos aspectos significativos en la oscuridad: la modalidad de trabajo y las condiciones de contratación. Además, experiencias anteriores, como la del CBC Lugano, sumado a la pertenencia papal de la administración de Scholas, encienden alertas sobre la probable regimentación de la vida académica y sindical.

La pelea por la expulsión de la injerencia eclesiástica en la educación y por una universidad laica es también la lucha por las condiciones laborales, el régimen de cogobierno y la orientación social.