Universidad

18/10/2018|1524

Derrotemos a Macri y a los ajustadores en la UBA

Ahora es cuando

Presidente de la FUBA

Las próximas dos semanas serán decisivas en el futuro de la Fuba, la principal federación estudiantil del país. La victoria de la izquierda en el centro de Medicina hirió de muerte a la “federación” paralela que Franja Morada y el rectorado de Barbieri habían montado mediante el fraude. Ahora, con las votaciones en Filosofía, Psicología, Sociales, Fadu y Agronomía los estudiantes pueden terminar de enterrar la “Fuba” trucha aliada a Cambiemos y recuperar los centros para la lucha docente-estudiantil y todas las causas que movilizan a las mujeres, los trabajadores y la juventud.


La primera tanda de elecciones, en el mes de septiembre, dio cuenta de un desplazamiento de importantes sectores del movimiento estudiantil hacia la izquierda. Las listas macristas se hundieron. Fue la conclusión a la que arribaron miles de jóvenes tras recorrer la experiencia de la marea verde y de la lucha educativa. Del “no se peleen con la Iglesia” a la entregada de la paritaria por parte de las burocracias docentes ligadas al PJ (Fedun) y el kirchnerismo (Conadu), se reveló una política consciente para dilapidar la fuerza del movimiento. Tanto desde las bancadas del Congreso como en la conducción de gremios como la AGD, la izquierda marcó otra perspectiva.


Esta es la confrontación estratégica sobre la cual deberán pronunciarse los estudiantes. La lucha en defensa de los derechos de las mujeres y de la educación pública no está solo atrás, sino sobre todo por delante. Es la amenaza que representa Bolsonaro y su plan de guerra contra los trabajadores. Es el presupuesto que Macri y los gobernadores del PJ negocian a la medida del FMI y que volverá a sacudir a la universidad. Son los pactos de Vidal con la Iglesia para bloquear la educación sexual. Es la persecución judicial sobre los activistas estudiantiles que se desató en Comahue, Córdoba y la UBA. Frente a este panorama, “esperar a 2019” solo conduce a la derrota. Es la hora, por el contrario, de recuperar los centros para una política de lucha.


En Filo, la izquierda ya presentó su lista para defender el CEFyL independiente. La decana Morgade sigue sin poder presentar a su agrupación, El Colectivo, cuando ya se vencieron todos los plazos. La Vallese (JUP) acaba de romper con este armado para ligarse a Épica, que responde al rector Barbieri. En Sociales, se formó un frente que reúne a la totalidad de las agrupaciones de izquierda, Oktubre, y que ofrece una alternativa positiva frente al desbarranque derechista y patotero de la UES. Camuflada de rosa y detrás del número 15, la Cámpora intenta esconder que fue la responsable de llevar a la UES al lugar en el que está.


En Psico, el EPA! (UJS) está peleando por un gran frente de toda la izquierda y los activistas independientes que, de constituirse, podría ganar el centro. El Impulso de los ex Libres del Sur y la Mella no pasó la prueba del movimiento de lucha y terminó abrazado al EDI/Franja Morada en las asambleas. La ruptura de Sur coloca a la actual conducción del CEP en el eje de fuerzas que este sábado peregrinarán a Luján a defender la “santa alianza” entre la burocracia sindical y el Vaticano, un cepo reaccionario contra las reivindicaciones de las mujeres. El movimiento estudiantil de Psico está para más.


En Fadu, presentamos una lista de izquierda junto a 300 candidatos independientes para enfrentar la propuesta de “kirchnerización” del Ceadig que comanda la Corriente, un puente hacia las autoridades privatistas de la facultad. En Agronomía, por último, seguimos batallando por un frente de todo el activismo que recupere el Ceaba, contra las presiones que ejerce la decana peronista Marcela Gally sobre el Fana, agrupación que la votó, para que el movimiento se disipe y se mantenga el statu quo (privatista) de la facultad.


Las agrupaciones de Macri y Barbieri llegan debilitadas a esta última tanda de elecciones y con su “Fuba” trucha bajo amenaza de extinción. A quienes quieren malversar la fuerza de las mujeres y la juventud en pactos con el régimen, respondamos con una votación maciza a la izquierda para poner en pie una dirección estudiantil a la altura del momento histórico. Ahora es cuando.