Universidad

20/7/2000|674

El rector y el PJ reprimen, los estudiantes se organizan

estudiante de Educación Física-UNLM

Como bien denunciamos en el PO Nº 672, la lucha de los estudiantes de la Universidad de La Matanza puso al desnudo la política de expulsión de los trabajadores de la universidad.

 

El martes 11 se realizó una impresionante movilización que conmovió a toda la comunidad. Alrededor de 200 personas se hicieron presentes reclamando el no cierre de Trabajo Social y la defensa de la educación pública.

 

Como resultado se consiguió la ‘garantía’ de la apertura del curso de admisión en la segunda instancia, pero con la carrera “reestructurada”. Lo importante a resaltar es que se fortaleció la organización de los estudiantes y se consiguió el apoyo de un núcleo de docentes, la declaración de compromiso a permanecer en asamblea permanente y la garantía de exigir que en la reestructuración de la carrera participen los tres claustros. El claustro de alumnos tendría que conformarse sobre la base de la asamblea permanente que tomó el departamento de Sociales.

 

La asamblea que funcionó el jueves 13 decidió resolver el levantamiento de la toma al día siguiente, en una gran asamblea.

 

Un día de furia

 

El viernes 14 a las 17:30 hs, una patota del Centro de Estudiantes (Liga Federal-PJ) encabezada por el hermano del rector, Daniel Martínez, irrumpió en el departamento de humanidades donde había siete compañeras y tres compañeros, a quienes se agredió brutalmente con palos y sillas. Incluso intentaron ahorcar a una compañera que estaba filmando y golpearon a una embarazada, que tuvo que ser hospitalizada.

 

La frutilla del postre: cuando los agredidos convocaron a otros compañeros, medios de prensa y a la Lista Violeta del Suteba – La Matanza, el rector ordenó cerrar los portones dejándolos junto a otros estudiantes encerrados en la universidad. Los compañeros quedaron contra el portón mientras la patota bloqueaba la única salida habilitada, con el amparo del rector.

 

Los compañeros que quedamos del lado de afuera cortamos la calle y originamos tal presión que obligó a hacerse presentes a un par de diputados y un concejal, que demostraron su inutilidad.

 

El juez (el único autorizado para abrir el portón) llegó recién a las tres de la mañana.

 

El cadáver insepulto del PJ apestó La Matanza

 

El Centro de Estudiantes sufrió una fractura terminal. Tenemos que plantear la renuncia inmediata de su dirección y convocar a nuevas elecciones. Mientras tanto, la Asamblea Permanente debe hacerse cargo de la conducción del Centro y empezar a trabajar en la defensa real de los estudiantes.

 

Queda planteada la unión de los estudiantes de Trabajo Social con los de las demás carreras. Ya se ha formado una comisión de Educación Física con ese objetivo.

 

Ya está convocada la asamblea que decidirá las acciones a tomar de aquí en más.