Universidad

15/4/2021

Provincia de Buenos Aires

Elecciones Unsam: escándalo de candidatos y avales falsos

El rompecabezas del fraude y los intereses que hay detrás.

Un nuevo episodio bochornoso sucedió en  vísperas de las elecciones de consejeres de la Unsam. Al sostenimiento del cronograma electoral bajo pandemia y sin clases presenciales, se le suma la falsificación de candidatos y avales en varias escuelas por parte de la lista Somos Unsam. Este arranque electoral retrata cómo funciona y qué intereses mueven a la universidad.

Se hizo público que la lista Suma Idaes (Somos Unsam en la escuela de Sociales) falsificó decenas de avales de estudiantes falseando sus firmas. Luego, salió a la luz en la escuela de Ciencia y Tecnología que la agrupación Jorge Sábato -que adhiere al frente Somos Unsam- llevaba de candidata a consejera de escuela a una estudiante que no había prestado su consentimiento para formar parte de la lista.  La repercusión fue tal, que el frente Somos Unsam tuvo que bajar sus listas en CyT e Idaes.

El frente Somos Unsam cuenta con dos de los tres consejeros estudiantiles en el consejo superior. Están íntimamente vinculados a sus respectivos decanos, al rectorado y a nivel general al albertismo.

Frentes sin principios

Dentro del frente comenzaron a pegarse entre ellos. La agrupación Jorge Sábato (CyT) denunció haber sido engañada y sostuvo que la falsificación del candidato había sido obra de Somos Unsam. Ellos, a su turno, presentan como  candidato a consejero de escuela a la misma persona que en la última elección de centro de estudiantes de CyT  había sido denunciada por armar listas falsificadas. Hoy, La Sábato posee todos los consejeros estudiantiles del consejo de escuela de CyT.

En la escuela vecina, la presidenta del centro de estudiantes de Humanidades, de la agrupación La Martí, encabeza la lista de Somos Unsam al consejo superior. Es secundada por un candidato del MUI, expresión universitaria del Partido Comunista, ligado al gobierno nacional. Hoy, La Martí posee todos los consejeros estudiantiles del consejo de escuela de Humanidades.

El hecho de que estas dos agrupaciones, La Sábato y La Martí, las cuales se denominan independientes, latinoamericanistas y feministas, compongan y encabecen el frente Somos Unsam, demuestra que ese discurso es solo para la tribuna. En los hechos, se juntan con las agrupaciones más estrechamente ligadas al rectorado, las cuales incurren en todas las irregularidades mencionadas anteriormente.

Por otro lado, están las listas Construir (ligada al decano de Sociales y al legislador Santoro), el Funk (más cercano a La Cámpora) y Nuevo Espacio (Cambiemos) para consejo superior, con sus expresiones en varias escuelas. Construir denunció el fraude, mientras que el Funk y Nuevo Espacio hicieron un silencio cómplice.

Toda esta ensalada de agrupaciones kirchneristas no debe confundirnos. En las últimas elecciones de consejo, se presentaron todos juntos en una única lista. El apetito de ingresar a los consejos de escuelas y superior los lleva a armar listas con quien fuere. Los mueve solo el principio de hacer carrera política al interior de la universidad.

La descomposición del régimen universitario: “el pez se pudre por la cabeza”

Así, tenemos agrupaciones y listas que buscan el beneplácito de las autoridades para conseguir un cargo en el rectorado.  Es por este motivo que actúan de “levanta manos” en los consejos, dándole la espalda a las reivindicaciones de la comunidad educativa. Y en  los centros de estudiantes que dirigen cierran todo debate y desalientan la organización estudiantil. De esta manera, las autoridades tienen las manos libres para actuar con la menor resistencia posible.

Como vemos, el bochorno de la falsificación de candidatos y avales por parte de estas agrupaciones estudiantiles tiene como telón de fondo el grado de descomposición que caracteriza a las autoridades con las que tejen lazos. Son ellas quienes hacen todo tipo de negocios con las carreras, mediante convenios con empresas y a través de la proliferación de posgrados y cursos arancelados. Además, como el presupuesto que gira Nación es cada vez más reducido, es la gestión de la Unsam la que replica el ajuste al interior de la universidad.

Cuando la frazada es cada vez más corta, y, además, manejar la universidad implica importantes negociados, se acentúan las peleas. Cada grupo o camarilla intenta desplazar al otro y reforzar su posición. Como el pez se pudre por la cabeza, esta orientación capitalista de la universidad se reproduce de las autoridades a las agrupaciones. Estos intereses son los que explican las falsificaciones de candidatos y avales, las listas truchas, las elecciones sin debate, incluso, presenciales en pandemia, el armado y desarmado de frentes y la aparición de listas de la noche a la mañana.

No somos todos iguales

Lo opuesto sucede en las listas de La Caldera y del Frente de Estudiantes de Izquierda.  Ocurre que en vez de guiarnos el interés de la carrera política y los negociados, nos guía el interés de hacer avanzar las reivindicaciones de les estudiantes y defender la universidad del ajuste que promueven las autoridades y los gobiernos. Por eso nos presentamos en un frente todas las elecciones.

De nuestra parte, armar las listas, conseguir candidatos y más de 200 avales, forma parte de la pelea por interesar a les estudiantes y sacar conclusiones en común sobre la cadena de responsabilidades que existe detrás del deterioro educativo al cual nos han llevado quienes nos gobernaron en las últimas décadas. También hacemos énfasis en la imperiosa necesidad de organizarnos de forma autónoma de los gobiernos por nuestras reivindicaciones cotidianas. Por eso no queremos elecciones presenciales en pandemia en la que el debate prácticamente está ausente, y es por eso también, que hemos impulsado numerosas asambleas, petitorios, reuniones, comisiones por carrera, etc. Este es el método que ha caracterizado a nuestra conducción en el CeCyT, el de la lucha a fondo, de manera colectiva, apelando a la más amplia participación estudiantil en defensa de las condiciones de estudio.

Que avancen les estudiantes: por una gran campaña de La Caldera-FEI

Como vemos, las elecciones sintetizan la disputa  que existe entre intereses sociales que son completamente antagónicos. Por un lado, estamos quienes defendemos los intereses de la comunidad educativa y la educación pública. Por el otro, los que buscan hacer sus negociados a costa de la universidad.

Nuestro desafío en estas elecciones es lograr ingresar al consejo de escuela de CyT y Humanidades, así como al Superior, para que exista una voz de les estudiantes que denuncie a quienes ajustan y actúan en la sombra, y, a su vez, que puedan haber consejeros que se pongan al servicio de amplificar los reclamos estudiantiles. ¡Vamos por ello!