Universidad

24/4/2017

Filosofía y Letras: estudiante trans pierde regularidad porque el sistema no reconoce su identidad

Se realizó una movilización para reclamar que se respete su identidad de género y vuelva a cursar.

Plenario de Trabajadoras y Agrupación 1969-FYL UBA


Una estudiante trans de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA) denunció que perdió su condición de alumna regular a causa de las demoras del sistema en compatibilizar su cambio de nombre e identidad. En respuesta a esa situación, los Consejeros de la UJS y el Plenario de Trabajadoras de FFyLL hemos impulsado una movilización al Consejo Directivo por la aprobación de un proyecto para que se respete la identidad de género de una persona trans y se le devuelva la regularidad. 


 


Las personas transexuales, travestis y transgénero son objeto de una gran estigmatización social, cultural, política y jurídica. La sociedad capitalista, donde la cultura de la clase dominante es patriarcal y heteronormativa, les reserva las peores miserias al punto de que su promedio de vida no supera hoy los 35 años. Esto es consecuencia de que no pueden la mayoría conseguir un trabajo estable, acceder al servicio de salud o concluir sus estudios, ni qué decir sobre cursar una carrera  universitaria.


 


El gobierno de Macri, cuya política actual es la de un ajuste en regla contra los trabajadores, ha abonado a un reforzamiento de esta opresión. El colectivo LGTBI arrancó la ley de identidad al Congreso bajo el gobierno kirchnerista mientras que las bases sociales que hacen que este colectivo tenga una expectativa de vida de 35 años siguen vigentes. Las mafias de la explotación sexual y la persecución policial sobre el colectivo trans han contado con el amparo del Estado. La ley 26.743 sobre el Derecho a la Identidad de Género aprobada fruto de una enorme lucha del colectivo frente a la resistencia de sectores de todos los bloques patronales, encuentra su mayor obstáculo en un régimen que es expulsivo de la comunidad trans. Es decir, que se le niegan día a día los recursos materiales para poder ejercer efectivamente su derecho a una identidad de género disidente.


 


Con la movilización estudiantil independiente de las autoridades que la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA se comprometa a realizar los cambios pertinentes para contemplar administrativamente la posibilidad de que una persona trans cambie su identidad y continúe cursando. Una vez más, se muestra con absoluta claridad el rotundo fracaso del Protocolo contra la Violencia de Género, aprobado como un mero saludo a la bandera por las autoridades radicales y kirchneristas. En contraposición a este régimen universitario contrario socialmente a los derechos de las mujeres y el movimiento LGTBI, el movimiento estudiantil y de mujeres a través del Centro de Estudiantes y de su Comisión de Mujer y Diversidad sexual viene cumpliendo un rol fundamental defendiendo estos derechos.


 


Hemos presentado el mismo proyecto en el Consejo Superior de la UBA para exigir al Rectorado que estas disposiciones se hagan efectivas y en todas las facultades.