El 11 de enero, la Federación Universitaria Argentina (FUA) publicó desde sus cuentas oficiales un comunicado sobre Venezuela con la firma de la presidencia de la Federación, es decir Franja Morada. Este posicionamiento no fue discutido en ninguno de los organismos de la Federación, que por otra parte ni siquiera se reúnen (la Junta Ejecutiva sólo fue convocada una vez después del Congreso para el reparto de Secretarías). 

El texto, que llama a desconocer la presidencia de Maduro, se apoya en el posicionamiento que días antes publicara el llamado Grupo de Lima, con el apoyo del gobierno de Trump, y en la posición de la Asamblea Nacional, donde hay una clara mayoría de representantes que tributan al imperialismo.

La impostura de Franja Morada

Debemos hacer notar que mientras el comunicado se despacha contra la “escalada represiva” en Venezuela, la Franja no ha dicho palabra sobre el reforzamiento represivo que impulsa el gobierno de Macri en Argentina, que incluye, entre otras cosas, la baja de la edad de imputabilidad, la compra de picanas Taser, la deportación de inmigrantes y la rehabilitación a las fuerzas armadas para actuar en la “seguridad interior”.

Mientras denuncia el “hambre para el conjunto del pueblo” venezolano, la Franja ha evitado pronunciar a la Federación contra los cientos de miles de despidos durante el gobierno de Macri, contra los tarifazos y la inflación que se come los salarios, y frente a la carestía que crece y que ya ha dejado a un tercio de la población por debajo de la línea de pobreza.

Volviendo sobre Venezuela, el texto reivindica que “la mayoría de países de Sudamérica” no reconoce a Maduro como presidente, pero se ahorra señalar que el objetivo del boicot del “Grupo de Lima” es imponer una salida derechista e imperialista a la crisis venezolana.

Lo mismo sucede cuando se reivindica la Asamblea Nacional, cuyo presidente Juan Guaidó, peón del imperialismo, se autoproclama presidente de Venezuela y reclama un golpe militar contra Maduro. 

Por eso, cuando Franja Morada condena los “tiempos de muros” y al “avance a nivel mundial de una derecha xenófoba”, lo que quiere es disimular que detrás de su posición política –que es la de su gobierno en Argentina-, se encuentra el máximo exponente de los “muros” y la derecha xenófoba, Donald Trump.

Pronunciemos al movimiento estudiantil por una salida de la clase obrera

El movimiento estudiantil, que ha salido masivamente a la calle el último año contra los planes de Macri y el FMI en Argentina, no puede suscribir la salida que Trump, Bolsonaro, Macri y el FMI quieren darle a la enorme crisis política, económica y social que atraviesa Venezuela. Debemos rechazar con fuerza la injerencia de todo tipo del imperialismo, que bajo la excusa de la "ayuda humanitaria" prepara el terreno de una intervención militar.

Esto al margen de la evidente responsabilidad del régimen de Maduro y de su camarilla militar arribista en el sufrimiento del pueblo venezolano, que tampoco deben ser dejados de lado.

Por esto, en oposición a la salida imperialista, los centros y Federaciones (incluyendo la FUA) deben discutir una posición por una salida de la clase obrera a la crisis venezolana, que imponga la nacionalización integral del petróleo y el gas, la vigencia plena de las libertades democráticas y una reorganización social del país sobre nuevas bases. En definitiva, son los trabajadores y el pueblo de Venezuela los que deben superar al nacionalismo en descomposición, no la derecha proimperialista. 

La UJS-PO será promotora de esta posición en el movimiento estudiantil y de acciones en consecuencia. Más que nunca, la unidad de la clase obrera y de todos los explotados de América Latina es necesaria para combatir al imperialismo y los gobiernos derechistas del grupo de Lima, y para pujar por una salida bajo la dirección de los trabajadores que ponga fin a la barbarie capitalista. 

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