El PRO y Cambiemos hicieron agua en las elecciones universitarias desarrolladas hasta ahora. 

En Medicina, el radicalismo aliado de Cambiemos y las autoridades perdió el centro a manos de una alianza encabezada por El Frente (UJS-PO),que sacó el 37,89%. La lista del PRO “puro” obtuvo por su parte el 1,88% de los votos, apenas por encima del Nuevo MAS (1,54%).

En Veterinaria, donde el eVet,la agrupación de la UJS-PO que conduce el centro, se impuso por un aplastante 72,45%, la lista amarilla salió en un muy lejano tercer puesto, con el 5,45%. En Derecho, donde volvió a imponerse Nuevo Derecho, la agrupación del PS, la lista del PRO sacó el 3,36%, la mitad de los votos que el Frente de Izquierda PO-PTS (6,88%).

En Económicas, corazón del radicalismo porteño,donde una alianza del MxE y la izquierda obtuvo el segundo lugar, los del PRO caen a un irrelevante 2,84%. El mejor registro del sello de Cambiemos fue en Ingeniería, donde quedaron terceros con un 10,43%. En los casos de Farmacia –donde volvió a ganar el Antídoto, impulsado por la UJS-PO– y Odontología, donde la UJS-PO salió segunda, el PRO ni siquiera presentó listas.

Estas contiendas electorales se producen en el marco de un ascenso de las luchas estudiantiles y docentes y de la juventud científica, que también viene organizándose contra los recortes y la precarización.

Los mercenarios mediáticos del gobierno, del tipo Feinman, tendrán que relamerse las heridas.

La juventud universitaria viene marcando el camino en la lucha contra el ajuste y lo está volcando también en las urnas.