Universidad

3/4/2020

Santa Cruz: sobre el “voluntariado” de la UNPA-UARG

El decano de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral y de la Unidad Académica de Río Gallegos lanzó una convocatoria a la inscripción de “voluntarios” que merece una reflexión. Sobre todo, porque detrás de un llamado a la solidaridad de los estudiantes se busca esconder el ajuste de la salud pública.


En primer lugar, cuestionamos que la convocatoria es genérica, sin especificar ninguna disciplina ni anunciar plan alguno de capacitación para cumplir determinada tarea. En todo caso, lo útil sería hacer abrir una inscripción de profesionales y estudiantes avanzados de ramas relacionadas a la salud. En la medida en que toda actividad de este voluntariado lleva a incumplir con el aislamiento social obligatorio, los convocados deberían tener una función real.

Aun así, rechazamos que se cubra con voluntarios las tareas que desempeñan trabajadores pero que en el contexto actual no dan abasto. Lo que reclamamos es el nombramiento del  personal necesario para afrontar la emergencia, con salarios y las condiciones contractuales que correspondan al convenio colectivo de trabajo.


Esta práctica de cubrir con el trabajo gratuito de los estudiantes los baches que deja el ajuste en la salud empalma con la política del decanato de ajuste y precarización laboral en la propia universidad, como ejemplifica el aumento del buffet y las fotocopias, y que los servicios funcionen mediante subcontratistas con trabajadores en negro.


El centro de estudiantes debería organizar un amplio debate sobre este voluntariado, sobre las tareas, las condiciones sanitarias y los medios con los cuales se realice. Los estudiantes tenemos que tener poder de decisión y de veto sobre lo que plantee el decanato.


La crisis sanitaria no exige voluntariados sino un aumento sustancial del presupuesto para salud, y de medidas excepcionales para reconvertir la industria para producir insumos críticos. Para aumentar los salarios de los trabajadores de la salud, contratar más personal y proveerlos de los insumos necesarios, más que nunca hay que dejar de pagar la deuda externa.