Finalizadas las cursadas de verano e ingreso, con las aulas vacías aguardando el inicio del cuatrimestre, este miércoles se llevarán a cabo las elecciones de decano de la facultad. 

Como en episodios pasados, la elección vuelve a reflejar la pelea de camarillas que atraviesa a la Universidad de Lomas de Zamora. 

La facultad de Sociales ha sido históricamente el bastión de la camarilla del ex vicegobernador bonaerense Gabriel Mariotto, pero en esta oportunidad su candidato Omar Szulak parece no tener viento a favor. A pesar de la adaptación de la camarilla de Mariotto a las políticas del gobierno de Cambiemos, su desprestigio dentro de la facultad se ha incrementado en los últimos años, fogoneado por la pésimas condiciones de edilicias en las que se encuentra la facultad, la degradación de los planes de estudio y un número importante de docentes ad honorem. Mariotto pertenece al núcleo duro del kirchnerismo, caídos en desgracia tras su derrota electoral, e imputados en distintas causas penales por enriquecimiento ilícito y defraudación a los fondos públicos. 

Quien suena como el candidato favorito para la contienda es Gustavo Nanón, proveniente del bando dirigido por el rector de la universidad Diego Molea, políticamente vinculado al Frente Renovador. Parece ser que el visto bueno para el recambio vino de la mano de las autoridades de la Coneau (organismo estatal que tiene a su cargo la evaluación de los contenidos académicos y la acreditación y reconocimiento de los títulos que expiden las universidades), lo que estaría desplazando las voluntades de los consejeros académicos hacia el sector de Molea.

La elección de un candidato digitado por el gobierno refleja que nos encontramos ante un estrechamiento de los vínculos de la gestión universitaria con la política de Cambiemos, quienes se han propuesto cerrar filas detrás de la reforma antieducativa, el vaciamiento de los programas académicos, la privatización de nuestros estudios y un ataque en regla contra la universidad pública. Los consejeros estudiantiles del FEP (conducción del Centro, que tiene 3) y Todos por Sociales (1, agrupación que responde a Molea) darían su voto favorable a este rearmado, consumando a espaldas de los estudiantes este pacto antieducativo.

Necesitamos un debate de toda la facultad

El carácter clandestino de estas elecciones y el hecho de que los realineamientos y recambios se procesen de puertas cerradas a la comunidad universitaria responde a que estamos ante un régimen antidemocrático amparado en la existencia de camarillas universitarias y claustros cerrados. De allí que la política que preparan no represente los intereses de estudiantes, docentes y trabajadores de la facultad.

Desde la UJS – Partido Obrero rechazamos esta elección a espaldas de la comunidad universitaria, que va a implicar un paso adelante en el plan macrista de ajuste a la educación pública. Exigimos que se posponga la elección del decano, para que  podamos garantizar una deliberación del conjunto de la comunidad educativa, en la cual docentes, estudiantes y no docentes tengamos la oportunidad de discutir respecto a los planes de estudio, apertura de cátedras alternativas, el presupuesto educativo, las políticas educativas, etc. 

Los consejeros estudiantiles y el centro deben pronunciarse contra estas elecciones, si no quieren convertirse en aliados del ajuste.