Universidad

10/6/2017

Toman sede de la Universidad de Luján


El jueves 8, sin previo aviso y entre cuatro paredes, el Consejo Superior de la Universidad de Luján (Unlu), encabezado por el rector Osvaldo Arizio, votó la adhesión de la universidad al nuevo sistema de reconocimiento académico. Para acallar a estudiantes y docentes el rector contó con las patotas del sindicato no docente (atunlu).


 


Sin embargo, los estudiantes ocuparon la Unlu -sede San Miguel- durante casi 24 horas. El reclamo de la comunidad educativa es simple: exigen un debate abierto y democrático sobre el sistema de reconocimiento académico y que a partir de tener las herramientas necesarias sea la comunidad educativa en su conjunto la que decida el futuro de la universidad.


 


Los estudiantes han decidido levantar la toma hasta el lunes próximo, dia en que se convocan nuevas actividades de difusión del conflicto.


 


La ofensiva que el gobierno nacional lleva adelante contra la universidad pública tiene sus fundamentos en el sistema de reconocimiento académico que -con el eufemismo de igualar la educacion tanto privada como pública- sólo busca darle un golpe de gracia a esta última eliminando materias de grado, desvalorizando las carreras públicas y desplegando un enorme combos de posgrados arancelados.


 


El objetivo final de estas reformas, a partir del achatamiento y la desvalorizacion de los titulos públicos, es moldear el sistema educativo a los intereses del mercado, tal cual declaró el ministro Esteban Bullrich tiempo atrás. Esta hoja de ruta se verificó en la “expo joven” realizada en la Sociedad Rural donde miles de jovenes fueron en busca de trabajo y se encontraron con empleos precarizados mal pagos y hasta pasantías gratuitas.


 


El rector de la Unlu, por supuesto, ni siquiera se tomó el trabajo de explicar cómo se adecuaría la Unlu a este nuevo sistema. Si lo dijera, quedarían al descubierto los negociados de todo color que tiene en carpeta.


 


El miércoles 14 sesionará la Asamblea Universitaria. Allí, el Rectorado corrupo buscará refrendar su decisión antidemocrática. Es fundamental preparar una fuerte movilización estudiantil y docente que derrote este intento de privatización.


 


Es necesario poner a discución el andamiaje camarillesco y capitalista de la universidad, donde un puñado de jefes de cátedra junto al rector someten a las grandes mayorías (estudiantes y docentes) a cursar y trabajar en condiciones precarias y con títulos devaluados.


 


Por la democratización de la universidad.