Ambiente

25/8/2021

A 10 años del rechazo al proyecto San Jorge, Mendoza dice no a la megaminería

Este 24 de agosto se cumplieron 10 años del rechazo al proyecto minero San Jorge, un plan que buscaba extraer cobre en una zona muy cercana al departamento de Uspallata.

En ese marco, miembros de la Asamblea Popular por el Agua realizaron este martes una agitación frente a la legislatura provincial, no solo como conmemoración sino también como reclamo del proyecto de declaración de Área Natural Protegida Uspallata – Polvaredas.

Paco Pérez, del Frente para la Victoria (PJ), era candidato a gobernador en ese entonces y legislador provincial y fue finalmente quien llamó a no votar a favor al Declaración de impacto ambiental presentada en ese entonces por Coro Mining Corp, concesionaria de la mina. Las manifestaciones populares en defensa del medio ambiente y por el calor popular que venía en consecuencia de la conquista de la ley 7.722, calor que aún persiste, le marcaron un gol en contra al peronismo en plena campaña electoral.

Luego, ya como gobernador, Pérez demostró su perfil megaminero al impulsar el mismo proyecto que había rechazado años atrás pero que incluía -a través de una nueva empresa- el traslado del cobre explotado a San Juan para poder ser tratado por fuera de la ley 7.722. Así llegó a enviar, en su último año de mandato, una comitiva a Macedonia para hacer lobby por el proyecto que sería presentado no como extracción de metales sino como “un yacimiento de cal y después trasladarlo a través de un ferrocarril que van a construir a 25 kilómetros en San Juan”. La tensión social permanente en defensa del medio ambiente malogró las expectativas de desarrollo de este proyecto, de la misma manera en que lo hizo con el intento de modificación de Cambia Mendoza y el peronismo sobre la ley 7722.

Defendamos el ambiente, que se declare Área Natural Protegida

En contraparte a los intentos extractivistas del peronismo y Cambiemos existe un proyecto de declaración de Área natural protegida presentado en la legislatura y que valoriza la importancia de la zona y la protege ante políticas extractivistas como el proyecto San Jorge.

Es que en la zona en conflicto se encuentra una zona de transición entre ecosistemas diferentes, es decir fronteras ecológicas o ecotonos, donde conviven tres ecorregiones: el monte, la puna y los altos Andes y en donde existe una gran biodiversidad y una alta tasa de vegetación y fauna estrictamente local.

El proyecto fue presentado por pobladores de Uspallata y apoyado por el movimiento ambiental de la provincia pero a pesar de los años no es tomado en cuenta. Este proyecto de Área natural protegida abarcaría el territorio desde el límite con San Juan por el norte y el este hasta el Río Mendoza al sur y la precordillera por el oeste, zonas que incluyen el Cordón del tigre y el Valle de Uspallata que también son enclaves de características particulares desde el punto de vista geológico y geomorfológico pero también desde los intereses megamineros que acechan la provincia.

Es necesario que el pueblo mendocino se mantenga en alerta frente a las políticas que buscan reinstalar la actividad megaminera en la provincia tras un triunfo -la ley 7.722- que lleva 13 años en alto y que es un símbolo en la defensa de los bienes comunes en todo el mundo. En esa línea la continuidad del impulso por la constitución de un Área natural en la zona en defensa de la biodiversidad en un momento tan crítico en materia ambiental en todo el globo es una reivindicación que no podemos dejar atrás.