Ambiente

4/8/2020

Basta de quemas en las islas: tras el masivo corte, se profundiza el plan de lucha

Se prepara un corte en el puente Rosario-Victoria de 48 horas para el fin de semana y una caravana náutica para el 16 de agosto.

Con un enorme corte con asamblea que reunió a alrededor de tres mil personas en la cabecera del puente que une la ciudad santafesina de Rosario con la ciudad entrerriana de Victoria, organizaciones ambientalistas, jóvenes, docentes, partidos políticos y personas autoconvocadas se manifestaron este sábado contra las quemas que hace varios meses se intensifican en la zona de los humedales del Delta del Paraná.

Se contabilizan más de 2.000 quemas en el período que, según algunos cálculos, han arrasado un territorio equivalente al triple del de Rosario. Se trata de 60 mil hectáreas de pastizales quemadas de manera intencional.

Se trató sin dudas de una de las movilizaciones ambientalistas más importantes de los últimos tiempos que hizo recordar a la gran lucha entrerriana por el Fuera Botnia, como lo destacó Luciano Cáceres, del Partido Obrero, durante su intervención en la asamblea. El fuego crece y la bronca también.

Por este motivo, la masiva concentración resolvió un corte con acampe de 48 horas a la altura del peaje del puente que une la ciudad de Rosario con Victoria para el próximo fin de semana, y una caravana náutica para el 16 de agosto.

Perotti, Bordet y Cabandié al servicio del capital agrario

El progreso de la frontera agropecuaria para proyectos ganaderos y/o de cultivos de soja es la principal causa de las quemas, y por diversas denuncias y contravenciones es sabido que los mismos propietarios de esas tierras son los responsables. Los gobiernos de Omar Perotti (Santa Fe) y de Gustavo Bordet (Entre Ríos) son cómplices de esta situación, conjuntamente con el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible nacional, Juan Cabandié.

Perotti declaró que “estamos en una etapa en donde a la naturaleza no la parás con un decreto, se necesitan lluvias y no las tenemos”, expresando el papel de encubrimiento de las quemas que ha jugado durante estos cinco meses, al servicio de los agronegocios y contra la salud de las personas y la naturaleza.

Por su parte el intendente de Rosario, Pablo Javkin, ladra pero no muerde. En este período se ha limitado a apuntar al gobierno entrerriano, lo que terminó en una reunión entre las provincias y el Ministerio de Ambiente para firmar un compromiso por la prohibición de las quemas ilegales. El tema de las quemas legales ahora también es una crisis, porque con o sin permiso las quemas no paran. Las llamas ya han llegado a la ciudad de Rosario y a la autopista Córdoba-Rosario. Se pasan la pelota porque todos protegen a la clase social terrateniente que usufructúa la renta del suelo, mucha de ella oriunda de Rosario y que explota impunemente el suelo de Santa Fe sin que ningún gobierno local se mosquee.

El socialismo gobierna en favor de estos intereses desde hace 30 años y en distintos períodos cogobernando con el Partido Justicialista, como la hace ahora Javkin en alianza con Perotti y Alberto Fernández, algo que le reprochan sus correligionarios. La gestión socialista favoreció la especulación inmobiliaria que los dueños de la soja y de la tierra promovieron en Rosario. El menemismo y el reutemismo, a su turno, les privatizaron los puertos.

Bordet se despachó con fuertes declaraciones… contra los habitantes de Rosario e isleños, señalando que las quemas son resultado de imprudencias que desatan focos de incendios cuando se acampa o comen un asado en los camping. Pero se sabe que las quemas son intencionales y que tienen que ver con liberar y limpiar de alimañas el terreno donde pastan las vacas. En las islas también hay casas de la burguesía, algunas sospechadas de cobijar narcotraficantes, como circuló en el under periodístico el año pasado.

Bordet se alinea abiertamente con los ganaderos, que el sábado pasado también se movilizaron del lado del puente que corresponde a Victoria –sin cortar la ruta- para exigir que “el Estado esclarezca las quemas que a ellos también los perjudican”. La impunidad política con la que está actuando se apoya en el hecho de que el lobby sojero lo bancan los gobiernos, como se ve con la situación de Vicentin.

Antes de ser gobernador, Bordet fue intendente de Concordia entre 2007 y 2015. Durante su gestión grupos ambientalistas denunciaron que la central hidroeléctrica de Salto Grande volcaba PCB, un producto químico altamente contaminante, en el Río Uruguay. En 2019 su gobierno, a través de un decreto, habilitó la fumigación terrestre a 150 metros de las escuelas y la fumigación aérea a 500 mts.

La única respuesta del gobierno nacional ha sido la militarización de las islas. Mediante un acuerdo entre Perotti y la ministra de Seguridad de la Nación, Sabina Frederic, desembarcó una dotación de efectivos del grupo Grupo Albatros para “evitar los incendios intencionales, que castigan a la vegetación y contaminan el aire en la ciudad y alrededores”. El mismo día se produjeron nuevos focos de incendio en las Islas, demostrando que la militarización solo apunta a amedrentar la movilización popular y de los trabajadores con el aparato represivo.

Parque nacional en las islas del Delta

Se hizo presente en el corte la centroizquierda del Frente de Todos: el PCR y Patria Grande, junto al diputado Carlos Del Frade. Este arengó por una “democracia federativa (…) donde tenemos que presionar a los sectores judiciales, políticos y económicos DE ACÁ”. El punto de señalar las responsabilidades de los terratenientes que viven en Rosario tiene un valor, porque el problema no es de tipo provincial sino de clase, vengan de dónde vengan los terratenientes que explotan la tierra de manera contaminante.

Los gobiernos de Rosario y Santa Fe le tiran la pelota al gobierno de Entre Ríos, pero no debe omitirse que la población rosarina y distintos negocios provenientes de Rosario son los que dominan en las islas. Esto se ve claramente en el usufructo turístico, para el esparcimiento, en la proliferación de clubes náuticos y en viviendas de la burguesía. Entre los primeros ganaderos citados por la justicia para que den explicaciones por las quemas, la mayoría era de Rosario.

Pero el tema es una impostura si sirve para sustraer de sus responsabilidades al gobierno nacional. Con el argumento de que las tierras pertenecen a la provincia de Entre Rios, Cabandié y el gobierno del Frente de Todos se limitó a una presentación judicial que no ha hecho ni podría hacer mella. Siendo un patrimonio natural del país y en general de la humanidad, corresponden tomar medidas que lo preserven, nacionalizando esas tierras y transformándolas en un Parque nacional para uso y disfrute de la población de todo el país, y que el Estado garantice el formato de una reserva natural donde se cuide este medio natural único.

El movimiento levanta la presentación de una Ley de Humedales, cuyo contenido es importante, pero difuso sino se modifica la propiedad de las tierras de las islas del Delta. Desde el Partido Obrero les proponemos a lxs compañerxs activistas ambientales un debate sobre la necesidad de la nacionalización y/o enajenación de esas tierras para fines del cuidado de ese hábitat natural, porque en manos de sojeros y ganaderos cualquier control es escaso. Es importante balancear las leyes vigentes que habilitan las “quemas controladas”, que han fracasado.

No queda en claro cuál sería el bloque político que presentaría esa ley: del macrismo al kirchnerismo, los bloques políticos patronales han favorecido la megaminería contaminante y los desmontes para la soja. Ponemos a disposición la banca de Romina Del Plá y el Frente de Izquierda para un debate común y la concreción de una ley.

Asamblea y plan de lucha: basta de quemas

La profundización del plan de lucha con el nuevos corte y la caravana es un paso clave.

Desde el Partido Obrero creemos que la defensa de las islas y del medioambiente demanda una lucha independiente de los gobiernos en todos sus niveles, porque son los que fomentan la depredación capitalista de los recursos naturales.

La salida requiere que organizaciones obreras, juveniles y ambientales sean quienes fiscalicen la preservación de los recursos naturales de las Islas del Delta del Paraná, así como una Ley de humedales que establezca la prohibición total de quemas y desmontes e instaure la creación de un Parque Nacional en las Islas, que funcione como una reserva ecológica con fines de cuidado del ambiente y de ocio para la población sin restricciones.

https://prensaobrera.com/ambiente/en-rosario-no-se-puede-respirar-el-humo-de-perotti-y-cabandie/

https://prensaobrera.com/ambiente/queman-las-islas-del-delta-del-rio-parana-la-catastrofe-ambiental-que-amparan-los-gobiernos/