Ambiente

15/2/2021

Contaminación

Chascomús: el basurero regional en plena crisis sanitaria

El municipio de Chascomús, gobernado por el “vecinalista” Javier Gastón, sigue avanzando en hacer de nuestro distrito un basurero de toda la región. A principios de febrero, en un acto al que acudieron Sergio Massa y Sergio Federovisky (viceministro de Ambiente), se anunció la entrega de maquinarias por más de 700 millones de pesos para un Basurero Regional. Se suma a la anterior inauguración que hiciera el propio gobernador Kicillof del “Parque Ecológico” financiado por el BID. Estos eventos de hacen a puertas cerradas sin acceso del públicos, luego de varias movilizaciones que mostraron la oposición de los vecinos al proyecto.

Esta política del gobierno municipal, emprendida desde hace seis meses, es una defraudación de los votantes de partido vecinalista que hace dos períodos gobierna el distrito, el cual reunía militantes de remera verde que juntaban plásticos en las orillas de la laguna y se oponían a los agrotóxicos. Pero ya desde el mandato de Vidal el intendente “Chapa” Gastón se alineó al gobierno provincial en busca de fondos.

Ahora para congraciarse con el gobernador acepta constituirse en una especie de Ceamse regional: en lugar del saneamiento del actual hípercontaminante e ilegal basural a cielo abierto del barrio El Porteño, fijaron allí mismo la zona de impacto para futuras cargas de basura traídas de Pila, Lezama, Castelli y Ranchos. Es alarmante que, basándose en que la zona “ya estaba contaminada”, se ahorren sacar basura de hasta cinco metros de espesor. La cooperativa que trabaja allí no cuenta ni con botas ni ropa adecuada que evite la exposición.

Ello fue generando un incipiente rechazo popular. El proyecto de Gestión de Residuos Sólidos Urbanos auspiciado por el BID, que comenzó llamándose “Polo Productivo (?) Ambiental”, luego Parque Ambiental y hoy Ecoparque, fue corrido por la movilización de los vecinos de los barrios El Algarrobo, La Noria y El Hueco. Luego de ello, durante un mes los funcionarios municipales evitaron informar a las asambleas que se movilizaban cuál sería finalmente la ubicación.

Hoy se sabe que el Ecoparque será radicado en Ruta 20, al otro lado de la Autovía 2. Ese barrio rural y alejado también está en crecimiento en cantidad de habitantes, quienes intentan preservar un acuífero que abastece de agua a 45.000 habitantes, según el último censo. En la zona ya pueden verse colgadas en los alambrados pancartas en rechazo al basural.

Esta política atenta contra las condiciones de vida de la población Chascomús, como moneda de cambio para recibir alguna partida del Estado provincial. Es el producto del ajuste, que se descarga sobre la población. Es una orientación que agravará la crisis sanitaria, que ha llegado a una situación límite: el hospital municipal fijó en sus puertas un cartel que advierte que “Sólo se atenderá casos de riesgo de vida”, cuando la otra opción para urgencias es una clínica privada que viene de conflictos laborales que en enero la llevaron a abrir sólo los consultorios externos.

Rechazamos que conviertan a Chascomús en un basurero regional. Defendemos el poder de veto de los vecinos de los barrios afectados sobre estos emprendimientos contaminantes, y planteamos el control popular de la gestión de los residuos urbanos, para encarar efectivamente un plan de saneamiento ambiental, con presupuesto y personal con todos los derechos laborales. Impulsemos la confluencia de las asambleas vecinales en una gran movilización que haga retroceder al gobierno.