Ambiente

17/6/2024

Cumbre de la economía circular en Córdoba, la impostura de Llaryora y Passerini

Una fachada encubridora de la producción capitalista contaminante.

Foto: La Voz del Interior.

Días atrás tuvo lugar en Córdoba la cuarta edición de la “Cumbre de la Economía circular”, en el contexto de una crisis económica que no muestras signos de reactivación. Precisamente, las intervenciones giraron en torno a la política económica de Javier Milei.

En este escenario, el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, brindo un discurso de ocasión con el que buscó delimitarse del presidente al manifestar que hay “liderazgos que niegan el cambio climático”. Se sabe que Milei niega el cambio climático para mejor encubrir el impacto ambiental causado por los monopolios capitalistas.

Además, la Ley Bases constituye una libertad para saquear y contaminar el ambiente. Sin embargo, el PJ cordobés la apoya en el Congreso. Lo que, si había alguna duda, es otra demostración de su orientación de depredación ambiental con la que vienen gobernando en las últimas décadas.

El evento dio lugar a un nuevo lobby de los capitalistas vinculados a la producción de biocombustibles. En ese sentido, plantearon elevar el corte de las naftas con bioetanol, y biodiesel, por supuesto que sin importar el impacto ambiental que la medida ocasionaría, aun cuando los suelos de Córdoba vienen siendo fuertemente golpeados, y el monte nativo fue reducido a una mínima expresión.

“El Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (Rigi) podría acelerar el crecimiento de la región de la “Vaca Viva”: la región central del país que concentra una potencialidad de producción energética con biomasa, comparable a las reservas de gas de Vaca Muerta, en el sur del país”, publicó La Voz. Patrick Adam, presidente de la Cámara de Bioetanol en Argentina, “cree que si sólo se aprobara un corte similar al de países de la región, se podrían invertir 2.500 millones de dólares en combustibles sustentables, según la citada fuente.

Lo señalado da cuenta de una de las razones por la que Llaryora y el peronismo con olor a soja apoyan la Ley Bases, aun cuando contenga una fuerte carga de depredación ambiental y saqueo de los recursos naturales en beneficio de los capitalistas que dominan las diferentes provincias. En ese sentido también debe verse el voto positivo al Rigi por parte de representantes del peronismo kirchnerista minero en provincias como Catamarca, Salta, y Jujuy.

También hubo discursos que hicieron referencia al desplome de la actividad por la manifiesta caída del consumo. Esto tiene su notable impacto en el reciclado de materiales. Sobre el punto, no hubo mención de un plan para salir de la recesión por parte de quienes gobiernan. Llaryora, la “ultraderecha” peronista, en su apego al gobierno de Milei ya ni mencionó su tan mentado slogan de la “producción y el trabajo”.

Hay que decir que la reforma laboral aprobada en el Senado tiene todo un anticipo en cómo funciona la red de trabajadores de la “economía circular”. En ese sentido, quienes se desempeñan en los Centros de reciclado municipales, no cuentan con aguinaldo ni vacaciones pagas. No hubo ningún tipo de mejora para lxs trabajadores que sostienen los Centros Verdes, que realizan sus tareas en un cuadro de precarización laboral, e ingresos de miseria.

El intendente Daniel Passerini omitió toda referencia a las consecuencias de la especulación inmobiliaria de alto impacto ambiental. En amplias zonas de la ciudad, el desarrollo inmobiliario capitalista degrada el ambiente y el funcionamiento de los servicios. En otras zonas, permanece la contaminación de empresas como Porta Hnos, una de las principales productoras de alcohol en el país.

Así las cosas, la cumbre de la economía circular constituye una impostura por parte de quienes gobiernan, a la vez es una fachada encubridora de la producción capitalista contaminante. Los intereses capitalistas a los que favorecen quienes gobiernan chocan con la posibilidad efectiva de impedir la contaminación. La defensa del ambiente, y una producción que no sea ecocida solo vendrá de una producción sobre nuevas bases sociales, lo que requiere de una intervención independiente desde el campo de lxs trabajadores.