Ambiente

22/2/2007|981

Debate ambiental en Tucumán ilustra la política oficial


Nos gobiernan los contaminadores. Esta fue una de las conclusiones que sacamos junto a distintas organizaciones ambientalistas, luego de participar en el seminario que se dictó en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la UNT, que tuvo como uno de los principales disertantes al doctor Lorenzetti, presidente de la Corte Suprema de la Nación, quien venía a presentar un proyecto de creación de fiscalías ambientales.


 


La intención de la iniciativa es poner paños fríos y burocratizar las causas judiciales que se presentan en contra de la contaminación. Los primeros artículos del proyecto señalan que la función del fiscal es actuar como “pacificador social”, o sea que no atiende a las demandas de vecinos y organizaciones ambientales.


 


Además, plantea que es necesaria la concertación entre las partes, es decir, “dialogar” con las empresas contaminadoras.


 


En la segunda etapa de la jornada, la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación pidió en una reunión la ayuda “de las organizaciones ambientalistas a la hora de tener que ‘pelear’ contra las empresas”. A lo cual retrucamos que “si ustedes, que son el gobierno, no pueden hacer que las empresas, los ingenios, las citrícolas o los emprendimientos mineros dejen de contaminar, ¿qué hacen ahí?, ¿por qué no se van y nos dejan gobernar a nosotros…? porque lo único que está demostrado acá que hoy ellos gobiernan, no ustedes”.


 


Los ambientalistas de Termas de Río Hondo dijeron que siguen esperando las respuestas del petitorio presentado a señora Picollotti, prometidas hace más de un mes.


 


Indignados fuimos expresando que estamos hartos de estas reuniones que no llegan a nada. Se denunció además la contaminación del agua en Concepción, producto de los desechos que cayeron en los ríos cuando se rompió el mineraloducto de La Alumbrera.


 


“No, no venimos a hablar de la mina”, nos respondieron, “sólo de la contaminación de la cuenca Salí-Dulce”. A lo cual se les contestó en forma rotunda: “¿Ustedes creen que la mina no tiene nada que ver con la cuenca?”.


 


Cabe acotar que durante la jornada, el doctor Lorenzetti no contestó a ninguna de las preguntas. Tampoco contestó cuando Alberto Lebbos y los miembros de la Comisión de Familiares de Víctimas de la Impunidad lo interceptaron en los pasillos de la Facultad para presentarle un petitorio sobre los miles de casos impunes en la provincia.


 


Esta bochornosa jornada ilustra que el gobierno no pretende dar una salida a la destrucción ambiental sino desarrollar una “contención social” de los asambleístas y trabajadores.