Ambiente

3/1/2022

Exploración petrolera en Mar del Plata: la izquierda le responde al intendente Montenegro

El Chubutazo está presente.

Este viernes 31, el intendente de Mar del Plata, Montenegro, salió a rechazar la exploración petrolera en la costa de Mar del Plata. Sostuvo que afectará al turismo y la pesca y que, por lo tanto, iría a la justicia para “poder determinar cuáles son los alcances que puede llegar a tener este tipo de maniobras en la costa de nuestra ciudad”. El referente del Partido Obrero en el Frente de Izquierda, Alejandro Martínez, le respondió al intendente sosteniendo que sus declaraciones están condicionadas por la presión de los sectores patronales, tanto de la pesca como del turismo, y por el reciente levantamiento popular en Chubut. Llamó a movilizarse contra la puesta en marcha de la exploración.

Efectivamente los sectores pesqueros y turísticos de la Ciudad se oponen a la exploración en la costa de Mar del Plata. El gobierno nacional argumenta que no afectará la pesca porque la exploración se produce prácticamente en la frontera de la plataforma submarina, donde no llega la pesca artesanal. Sin embargo, el daño de la exploración sísmica sobre la fauna ictícola no puede reducirse al área donde la misma efectivamente se produce, porque las migraciones de cardúmenes se producen en radios mucho más amplios. La exploración golpea a la fauna marina mucho antes de instalar las plataformas, porque la misma se produce con un método de bombardeo de la plataforma submarina que genera explosiones cuyo sonido afecta el comportamiento de las especies marinas.

Pero las declaraciones de Montenegro no solamente recogen la oposición de los sectores patronales de Mar del Plata. También traducen el peso de la rebelión popular en Chubut, que condiciona a todos los bloques políticos. El pueblo de Chubut movilizado y el paro de sectores de trabajadores, como los pesqueros, impusieron una derrota al gobernador Mariano Arcioni y su intento, junto a todo el arco político patronal, de instalar la megaminería en la meseta patagónica. Las declaraciones de Montenegro toman en cuenta esta situación. También lo hace el diario Clarín, que en su editorial de Ignacio Zuleta afirma que “en Mar del Plata despunta una guerra ambiental”. Y que tales conflictos, en esta etapa, “los pierden los gobiernos”. Todo el arco político tomó nota del alcance de las tendencias que contiene la rebelión en Chubut.

La respuesta de Montenegro a la situación es una presentación judicial inocua. No solo eso, está destinada a llevar “tranquilidad” en momentos en los cuales se prepara una gran campaña de agitación y movilización popular contra la aprobación de la exploración. El intendente, frente a este proceso, quiere curarse en salud tratando de evitar que una movilización como la ocurrida en Chubut lo cuestione. Es que los proyectos de exploración en Mar del Plata son de la gestión de Cambiemos en la Nación y la Provincia. Las declaraciones, de hecho, se cuelan en la interna y la crisis del PRO, porque cuestionan la política al respecto de Vidal.

Este cálculo político debe ser muy tenido en cuenta por el movimiento de lucha. Más aún porque la propuesta de Montenegro de ir a la justicia no va a dar ningún tipo de respuesta. Los fallos judiciales en materia ambiental llegan tarde, cuando llegan, y nunca resuelven los problemas de fondo. Hay casos icónicos, por ejemplo, el fallo de la Corte sobre la aplicación de la Ley de Glaciares que dejó intacta la explotación de Veladero. La movilización de Chubut muestra el camino opuesto: se logró la derogación de una ley por parte de la misma legislatura que la había votado una semana antes. Las movilizaciones que ya han comenzado en Mar del Plata y toda la costa tienen esa perspectiva.