El pasado martes 26 de septiembre, el juzgado federal en lo criminal y correccional numero 2 de Morón, aprobó el paso de transporte navegable sobre el cauce acuífero, solo con fines turísticos, desde su desembocadura con el Río de la Plata y el transbordador Nicolás Avellaneda.

“El Ministerio de Turismo y Deportes de la Nación y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires habían elevado un periodo para lograr la navegación en esta zona. El objetivo es crear un corredor de navegación entre Tigre y Quilmes, con parada en La Boca. Este ‘Paseo Náutico circuito Quilmes-Tigre’ se extiende 60 kilómetros. ‘Una de las paradas turísticas intermedias propuestas dentro del recorrido implica la navegación de entre 150 y 200 metros del cauce del Riachuelo y el embarque-desembarque del puente transbordador’ detallaron autoridades judiciales” (Pura Ciudad, 26/09).

De este modo, tanto Juntos por el Cambio como Unión por la Patria-PJ, militaron en conjunto, el fenomenal negocio especulativo, turístico y financiero. Firmas de reconocidas entidades bancarias (Banco Ciudad), cadenas hoteleras, de servicios turísticos, vienen desarrollando actividades deportivas y culturales en la zona por este fin.

No es novedoso que sea la desembocadura el lugar elegido para comenzar con la navegabilidad. Pese a ser una zona pequeña, en cantidad de metros permitidos, es el centro del mercado turístico, a escasa distancia del paseo Caminito y La Bombonera. Con un escenario marcado por la fuerte devaluación del peso, definida por Sergio Massa y el FMI, sumado a futuras alzas post 22 de octubre, la Argentina (y en especial el Amba) se ha transformado en lugar ideal para la “inversión” del gran capital internacional. Un negocio en regla para la fuga de millones de divisas.

Navegando en medio de la contaminación

De los dos lados del Riachuelo, tanto La Boca (CABA) como Isla Maciel-Dock Sud (Avellaneda) los niveles de polución, los ubica como una de los territorios más infectados del continente, y, a la cuenca, como el espejo de agua más contaminado del planeta.

Industrias como Shell, Deheza, YPF, Petrobras, Trieco SA, Cementos Avellaneda, por nombrar algunas de las más de mil instaladas en la zona, descargan centenares de litros de desechos altamente contaminantes, como Zinc, Mercurio, Cromo y metales altamente pesados. Provocando un desastre tal, que, según especialistas ambientales, han transformado al Riachuelo en una cloaca imposible de recuperar. Descargas en aguas, tierras y aire, sin ningún tipo de control por parte del Estado.

Estudios médicos realizados a habitantes próximos al Polo Petroquímico de Dock Sud (el más grande del país) han dado como resultados que niños, niñas, adultos mayores y mujeres embarazadas poseen el triple de lo normal en niveles de plomo en sangre. Sustancia que ha provocado (y sigue provocando) enfermedades crónicas, diabetes, infecciones cutáneas y multiorgánicas, abortos espontáneos, linfomas, leucemias y hasta la muerte.

Al hacerse públicos dichos resultados, y como parte de una denuncia de vecinos de Villa Inflamable (Avellaneda) encabezados por Beatriz Mendoza (trabajadora social), quince años atrás la Corte Suprema de Justicia de la Nación sentenció definiendo a la vera del Riachuelo como “Zona Inhabitable”. Instando al Estado (gobierno nacional, de la provincia de Buenos Aires y CABA) a la tarea de saneamiento. Y se prohibió el paso de barcos y buques.

Para dicha tarea, se crea la Agencia Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar), ente que no ha cumplido con el cometido. Cero controles, cero inspecciones, cero obras. Las industrias siguen contaminando y continúan siendo miles quienes sobreviven inmersos en la podredumbre y precarización.

Previo a levantar la prohibición de navegabilidad, en 2022 se desarrollaron dos audiencias públicas. En las mismas, especialistas ambientalistas rebatieron la idea de “aguas limpias”. Sucede que la densidad de las partículas de metales pesados provoca que se alojen en el lecho submarino. El movimiento de aguas, a causa del ingreso y egreso de grandes barcos los traerá nuevamente a la superficie.

“Acumar acompañó la propuesta de navegabilidad entendiendo su importancia para promover la recuperación territorial, cultural y económica en el cuenca. La idea es incorporar este proyecto al que ya estamos llevando adelante entra las dos orillas de La Boca-Isla Maciel, para que el Riachuelo no se un límite, sino un lugar de encuentro” expresó el presidente de la autoridad, Martín Sabbatella, mediante un comunicado de prensa. Dicho texto no expresa en ningún párrafo cuáles son las obras previstas para sanear el espejo de agua.

La aprobación de la navegabilidad, sumado a la inacción de Acumar, deja en claro para quiénes gobiernan tanto Juntos por el Cambio, como Unión por la Patria. Libertad Avanza tampoco queda afuera, declarando no creer en el cambio climático, a causa de la depredación ambiental. De espaldas a los vecinos de la ribera que sufren la crisis habitacional, ausentes de redes cloacales, agua potable, redes pluviales, servicio eléctrico seguro y asfalto. En beneficio de las grandes ganancias del empresariado especulativo.

Una salida de la clase obrera

La navegabilidad es un nuevo ataque al pueblo trabajador. Es tiempo de ganar las calles por un el inmediato cumplimento de la sentencia de la Corte Suprema. Reubicación de todos los vecinos. Planes de viviendas populares y obras públicas, bajo control de los habitantes de las barridas más urgentes. Comisiones se seguridad e higiene en todas las barridas, villas y asentamientos, confirmadas por vecinos, organizaciones sociales y ambientales.

Desde el Partido Obrero en el Frente de Izquierda vamos por el ingreso de diputados, legisladores y concejales, que levanten tribunas de denuncia a los gobiernos socios de los especuladores financieros, inmobiliarios y turísticos, y el empresariado depredador ambiental. Y que sirva como medio de organización en reclamo y defensa por los derechos y reivindicaciones básicas insatisfechas del pueblo trabajador.

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https://prensaobrera.com/ambiente/sobre-las-politicas-antiambientalistas-de-milei