Ambiente

8/1/2022

Kicillof da su aval a las petroleras en el Mar Argentino

Otro K que sale a defender el saqueo colonial.

Después de varios días, el gobernador bonaerense Axel Kicillof rompió el silencio y se pronunció a favor de la instalación de las plataformas petroleras frente a la costa marplatense. Probablemente, la tardanza tuvo que ver con evitar ganarse el repudio anticipado de un creciente movimiento popular que lucha contra la depredación del Mar Argentino.

Sumándose al coro de funcionarios del gobierno nacional que defienden rabiosamente las exploraciones y explotaciones hidrocarburíferas en el mar, las declaraciones de Kicillof no tienen desperdicios: afirma principalmente que para la provincia y los municipios “va a ser una actividad económica muy importante y que podría generar ingresos por más de 32 mil millones de dólares” (Infobae, 6/1). Por otro lado, aduce que no va a afectar la cuestión visual y que es improbable que suceda un derrame. Además, manifestó la importancia de la cuestión ambiental y que hay que asegurarse que estos pozos se hagan con todos los cuidados. También que Equinor, la empresa operadora del proyecto, tiene 6.000 pozos y no tuvo ningún accidente y que exploración en el Mar Argentino viene de los años ‘60 y no ha generado nunca un problema ambiental. Finalmente, dice que la petrolera nacionalizada YPF va a ser una garantía acompañando los trabajos off shore junto a los pulpos petroleros extranjeros.

Estos planteos del primer mandatario de la Provincia de Buenos Aires se caen como un castillo de naipes.
En primer lugar, hay una evidente desesperación para recaudar divisas y congraciarse con los acreedores de la deuda pública y que trae bajo el brazo un brutal ajuste presupuestario que incluye al área ambiental, como hemos denunciado oportunamente; o sea de ninguna manera un desarrollo productivo en beneficio de las mayorías trabajadoras y que no impacte negativamente en la naturaleza.

Segundo, lo del tema del ambiente es un saludo a la bandera, todos sabemos que los controles son prácticamente inexistentes y hay una connivencia histórica entre los gobiernos y los contaminadores, está para probarlo por ejemplo la megaminería o los incendios en varias provincias. El ministerio nacional a cargo de Juan Cabandié apela a la demagogia permanente mientras avanza la depredación ambiental en el país, solo resistida por las grandes luchas y movilizaciones populares. Ni mucho menos, el nuevo Ministerio de Ambiente bonaerense, cuya titular Daniela Vilar no ha emitido todavía opinión del tema y hereda toda la estructura cómplice e inoperante del OPDS (anterior organismo ambiental).

Después, lo de que no hubo accidentes es una falacia: en Noruega, los reclamos son cada vez mayores sobre Equinor y su intervención destructiva en el Ártico. En cuanto a los derrames, que involucraron a petroleras como Shell e YPF, están los incidentes de los años 1999, 2007 y 2008.

Tercero, la petrolera YPF, una sociedad anónima con mayoría estatal,no puede brindar ninguna seguridad de nada. Es “testigo” de un esquema colonial de saqueo y tiene el antecedente del pacto leonino con Chevron en Vaca Muerta (Neuquén), cuyo artífice fue el actual gobernador cuando era secretario de Política Económica y Planificación del Desarrollo de Cristina Fernández de Kirchner a mediados del año 2013. En Vaca Muerta, constantemente se reportan siniestros de fugas, emanaciones o explosiones en la zona y muertes de operarios, con la vista gorda del Sindicato de Gas y Petróleo de Neuquén liderado por el burócrata Guillermo Pereyra. ¿Por qué sería distinto en el mar?

Las palabras de Axel Kicillof solo apuntan a desprestigiar al movimiento de lucha socioambiental. Acusándolo de que obstaculizan la producción y las fuentes de empleo. Absolutamente falso, la defensa del ambiente ante un régimen político del capital que lo destruye va asociada a las luchas por el salario, condiciones laborales, la salud, educación, etc. Por eso hay que insistir en el camino de la organización, las asambleas para seguir en las calles impulsando un plan de acción para, en primer lugar, anular los permisos para las petroleras en el mar; segundo, fuera Cabandié, y tercero, fortalecer todas las reivindicaciones pendientes en nuestra provincia.