Aniversarios

26/6/2020

“Si vos estás poniendo en tu gobierno a los principales responsables de la masacre de Avellaneda, los estás avalando”

A 18 años de la masacre de Avellaneda entrevistamos a Alberto Santillán, padre de Darío Santillán.

¿Cuál crees que es la actualidad de la lucha contra los responsables de la masacre de Avellaneda?


La situación sigue siendo igual, nada más que a 18 años la injusticia sigue estando, esperando que la justica haga algo. Porque si pensaban que nos conformábamos únicamente con la condena de Franchotti y Acosta están muy equivocados. Todavía estamos esperando que la justicia actúe y vaya por los políticos, que nosotros lo venimos señalando hace 18 años. Son políticos que se reciclan, los que llevaron adelante la masacre de Avellaneda, siempre estuvieron en todos los gobiernos: en el de Néstor y en el de Cristina y en el de Alberto Fernández. Vos fíjate que siguen estando, como limpiando sus caras de asesinos, Felipe Solá como Canciller; Aníbal Fernández como interventor del Yacimiento de Río Turbio y Duhalde como principal fuente de consulta ante cualquier actitud que tome el gobierno. Entonces sabemos ahí que seguimos luchando, no nos vamos a correr, evidentemente cuando no hay voluntad de la política para llegar a donde tiene que llegar sabemos que la justicia tampoco lo va a hacer. Eso no quiere decir que dejemos de batallar.


Hace 18 años que mataron a Darío y a Maxy y extraño muchísimo a mi hijo, muchísimo, y sin embargo los principales responsables siguen fogoneandose amparados por cada gobierno de turno, incluso este nuevo gobierno que se dice nacional y popular. Las primeras palabras de Alberto Fernández antes de abrazarlo a Duhalde fue decirle que fue el bombero que salvó del incendio a la patria. En realidad él lo que hizo no fue apagar ningún incendio, sino lo que hizo fue apagar la llama, el corazón, de mi hijo Darío y el de Maxy. O sea que estamos completamente diferenciados con respecto a todo esto y a 18 años hay una parte importante de la sociedad que también está buscando justicia y que los que llevaron adelante la masacre de avellaneda paguen y podamos meter algún responsable político preso.


¿Están vigentes la lucha y las ideas de Darío y Maxi?


Si vos escuchas lo que decía Darío y lo trasladas a la actualidad la situación es igual o es peor, o sea que el reclamo sigue siendo el mismo. Hace 18 años lo mataron a Darío y hay chicos que están naciendo, abren los ojos, y saben que el padre no tiene trabajo, saben que ellos tampoco van a tener trabajo, saben que están aislados de todos los beneficios. Ojalá fuera como pensaba Darío, eso del deseo de la revolución, que en ese momento no se veía. Pero si, yo apuesto a una juventud, a la juventud que tenía Darío, que es la que está luchando para cambiar todo esto. No nos equivoquemos, cuando la sociedad prejuzga a la juventud también hay una juventud que quiere cambiar todo esto. Yo apuesto a la juventud. Hay una juventud que tiene los mismos principios y las mismas cosas revolucionarias que pretenden cambiar todo esto, y alguna vez tendremos una justicia popular, porque si esperamos de la justicia real estamos muy lejos, es muy difícil. La justicia tiene que llegar de la mano del poder popular.




¿Este gobierno tomó alguna medida para terminar con la impunidad de la masacre de Avellaneda?


Yo mandé una carta a través de una persona a Alberto Fernández para que me reciba. Pensé que en su momento estaba interesado, pero entonces ¿cómo me puedo entrevistar con un tipo que tiene en sus filas a Solá, a Aníbal Fernández, a Duhalde, los principales responsables de la masacre de Avellaneda? No puedo hablar nada con él. Si él no los hubiera tenido en sus filas no tengo problema para decirle tal cosa, incluso para apoyarlo, pero evidentemente está muy lejos de lo que yo pienso este gobierno, que nació como nacional y popular. Me parece que fue una gran defraudación.


¿Qué efecto producen estas integraciones que mencionas del gobierno de Fernández?


Justamente. Si vos estas poniendo en tu gobierno a los principales responsables de la masacre de Avellaneda, los estas avalando, estas mintiendo en su imagen. Entonces, ¿qué tengo que ver yo con un tipo como Alberto Fernández? No tengo nada que ver. Como en su momento también creí un poco en Néstor Kirchner, cuando apareció en la Casa Rosa, me abrazó y me dijo “vamos a investigar hasta las últimas consecuencias”. No me importa el político que esté. Cualquier político que este mezclado o tenga que ver con la masacre de Avellaneda yo voy a ir por la cabeza de ellos. Sin embargo, fue una gran mentira. No quiero falsas promesas, prefiero quedarme parado en la vereda de lucha y no correrme de eso. Con estos gobiernos no tengo nada que ver, ni con los gobiernos anteriores. Cuando no hay voluntad política no hay voluntad de la justicia, para llegar a aclarar lo que pasó en Avellaneda. Una gran parte de la sociedad insiste y quiere justicia, porque sabe que sin una orden del gobierno nacional, como en su momento era Duhalde, como el gobernador provincial era Felipe Solá, sin embargo pasaron largos 18 años y laburamos más que los fiscales y que los jueces para presentar las testimoniales, presentando pruebas y sin embargo la justicia no los alcanza.


¿Consideras que hay un hilo de impunidad durante todos estos años?


La clase política que protege una mano con la otra. Lo que nosotros hemos conseguido en estos largo años de lucha, como la condena a Franchiotti y Acosta por cadena perpetua; pudimos conseguir que se reabra la causa federal; pudimos conseguir que se cambie el nombre de la Estación Avellaneda y se ponga el nombre de Darío y Maxy, lo hemos conseguido en la calle, en la lucha, en base a poner pulmón, pulmón y pulmón. Y si piensan que nosotros nos vamos a poner en la no exigencia de condenar a los responsables políticos están muy equivocados, vamos a seguir insistiendo en la lucha. Yo veo como en estos 18 años todos los responsables políticos se siguen codeando con los gobernadores y con los presidentes de turno. Entonces, yo recuerdo los sueños de mi hijo, su compromiso con la vida, su compromiso con los compañeros, y hasta el último instante es absolutamente autentico lo que decía, por eso el loco se quedó, sabía que lo iban a matar. Y yo lo entiendo, es un ejemplo de vida, es un ejemplo de compromiso, por eso se lo mantiene tan alto. Pero no únicamente nosotros como familiares, sino que tambien tenemos mucha militancia que nos acompaña y también una parte de la sociedad en la búsqueda incesante de justicia. El día que pongamos a uno de estos políticos presos creo que esto va a cambiar un poquito.


¿Cuál es el camino a seguir en esta lucha?


Los sueños en búsqueda de justicia sabemos que es difícil, pero tambien te puedo decir que los sueños que tenía Darío eran los sueños que tenían los 30 mil compañeros detenidos y desaparecidos, los sueños de Darío fueron los de otros compañeros asesinados, siguen prolongados en una juventud que quiere hacer un cambio. Por eso, si haces un poco de memoria y escuchas las palabras de Darío son actuales, como para hoy. Darío tambien ha germinado en un montón de otros jóvenes, repartidos por toda la Argentina.


Nosotros sabemos muy bien como lo mataron a Darío, pero también sabemos muy bien como vivía Darío y lo que dejó. Muchos compañeros han caídos y muchos compañeros siguen su lucha, levantan sus banderas. Entonces no nos correremos hasta que no tengamos una verdadera justicia. Yo amo a mi hijo, extraño a mi hijo. Por eso cuando a veces uno se siente mal están los militantes ahí para que uno no se caiga, porque la lucha es una sola. No es únicamente la lucha por Darío y Maxy sino por muchos casos que todavía siguen impunes.