Dos miembros de la Comisión Interna del Banco Credicoop nos han informado, como parte de una campaña que han emprendido, que la patronal ha dejado trascender un plan de 500 despidos de trabajadores sobre el plantel de 2.400 que existe actualmente.



Nos informaron que la Interna, electa en diciembre pasado, viene resistiendo esta  ofensiva ‘flexibilizadora’. La patronal ha impuesto, como en otros bancos, un régimen de prolongación ‘de hecho’ de la jornada de trabajo. Los compañeros deben permanecer, a pedido de la empresa, después de su horario de trabajo, sin niguna remuneración por esas horas y  a título de “colaboración con la empresa”.



Otro método consiste en la “calificación”  del personal cada 6 meses, a total arbitrio patronal, que tiene en cuenta presentismo, “colaboración”, “nivel de adaptación”, y otros rubros por el estilo, que pueden significar  para el que no califique hasta un 20% de descuento del sueldo.



Una tercera “verdugueada” es la determinación de “rentabilidad por sucursal” (nivel de producción), según la cual se realiza una distribución suplementaria de tickets canasta.



Los compañeros denunciaron otras provocaciones, como retirar licencias gremiales que pagaba desde hace 10 años o descontar el día del bancario, que figura como asueto en el convenio de trabajo. “La empresa no se siente sujeta al convenio”, declaró la gerencia de personal ante éste y otros reclamos, como el de cumplir con el otorgamiento de categorías por antigüedad.



Los compañeros caracterizan que van a una lucha decisiva y se preparan para ella; que tienen un altísimo grado de afiliación en el banco; que el cumplimiento del paro del 8 fue excepcional y que más de 40 delegados se están reuniendo sistemáticamente. Agregaron, finalmente, que tienen un balance muy positivo del  frente que han constituido con otras internas  y activistas antiburocráticos del gremio y se preparan para que el Encuentro Bancario del próximo 29/8 sea un salto en la organización del activismo.