En una asamblea realizada en el Sindicato de ATE, el sábado 22, el PO catamarqueño proclamó a Antonio Torrente, luchador docente y uno de los dirigentes de la Coordinadora Contra la Impunidad y el Encubrimiento, como candidato en primer término a diputado provincial, y a Tato Traverso, dirigente del personal de la sanidad del Hospital San Juan Bautista (el más importante de la provincia, movilizado contra la ‘autogestión’), como primer concejal por Valle Viejo.

En la asamblea se discutió la situación provincial, allí se denunció el desdoblamiento electoral como una maniobra para sacar las elecciones del escenario que se abrirá a partir de junio con el juicio por el caso María Soledad. En el informe se destacó la acentuada descomposición del saadismo.

Iramain Ortiz (ex presidente del tribunal que juzgó el caso María Soledad), acaba de romper con Saadi, señalando que el gobierno menemista no está dispuesto a financiarle la campaña electoral al saadismo. Un proceso de descomposición similar sufre el Frente Cívico, del cual se separaron un conjunto de corrientes, que ahora irrumpen con el Frepaso (ver nota aparte).

En este cuadro se remarcó la importancia de la política del PO de impulsar la intervención electoral, llamando a formar un frente de izquierda y de los sectores combativos. En este sentido la izquierda ha  preferido la política del avestruz, o sea la abstención, en vez de actuar unida en un frente y presentar batalla a los candidatos de la patronal. A pesar de esto, importantes luchadores se han incorporado a las listas impulsadas por el PO a favor de un Frente de Trabajadores. Se aprobó hacer una gira para completar la presentación de listas municipales en Andalgalá y Santa María, además de Belén, y la salida de una declaración provincial, asi como declaraciones por municipios explicando la plataforma del PO, y un conjunto de resoluciones para reforzar las finanzas y la intervención de la UJS en la campaña.