Aniversarios
15/12/1994|434
Jorge Fisher y Miguel Angel Bufano
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Hace 20 años, el 13 de diciembre de 1974, nuestros compañeros Jorge Fisher, “el Pato”, y Miguel Angel Bufano, fueron secuestrados por la “Triple A” en la puerta de la fábrica en que trabajaban (Miluz, en Villa Martelli). Sus cuerpos acribillados fueron encontrados dos días después en Avellaneda.
En plena juventud —Jorge tenía 25 años y Miguel Angel apenas 23— fueron líderes del movimiento obrero. Fisher era el delegado general de Miluz, no tenía la antigüedad “estatutaria” pero una asamblea de fábrica decidió postularlo igual y defender su elección. La lista con el “Pato” a la cabeza barrió en las elecciones y la burocracia tuvo que reconocerlo. Miguel Angel, cuando apenas tenía 19 años, fue elegido delegado de sección y miembro de la Comisión Interna de ATMA. Luego entró a Miluz. Jorge era miembro del Comité Nacional de Política Obrera, Miguel Angel era miembro del comité de zona Norte.
Jorge y Miguel Angel se empeñaron en la construcción del partido en la clase obrera y se entregaron totalmente a esta tarea. Tuvieron que callarlos con cuarenta balas porque habían derrotado a la patronal y a la burocracia en todos los terrenos, en las elecciones, en las asambleas, en las reuniones de delegados.
A mediados de octubre del ’74, veinte parapoliciales fueron a buscar al “Pato” a la casa de su padre. Después de destrozar la casa se llevaron al padre y lo tiraron por el camino. Una asamblea repudió el atentado con paros de dos horas por turno. La fábrica fue inundada por volantes amenazándolos con aplicarles “la justicia divina”. Una nueva asamblea, la más masiva que se recuerde en Miluz, ratificó a los delegados y repudió la campaña terrorista.
Cuando los cuerpos de Jorge y Miguel Angel fueron encontrados, la fábrica entera paró y desfiló, como un solo hombre, por su velatorio. La responsabilidad en el crimen de la Comisión Directiva del Sindicato de la Pintura aún no ha sido esclarecida.
Diez días más tarde, un comando de la “Triple A” acribillaba al compañero Noriega, simpatizante del PO y delegado de la planta, que había tomado a su cargo la dirección de la interna, destruyendo lo que quedaba de la organización gremial clasista y combativa.
Fisher, Bufano, Noriega, fueron la expresión más alta de la disposición combativa y de la conciencia revolucionaria de la juventud argentina. Nuestro partido les dice Presente y tiene la absoluta convicción de que la clase obrera impondrá el “juicio y castigo” por estos crímenes.