Universidad
19/9/2001|722
Sexta Marcha de Antorchas en La Plata
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Nuevamente, la Marcha de Antorchas fue masiva. Superando todos los frenos de las direcciones centroizquierdistas de la CTA *que luego de la impresionante movilización de 60.000 compañeros a Plaza San Martín, se han empeñado en seguir el ejemplo de la dirección Celeste del Suteba levantando todas las luchas* la Marcha de Antorchas crece de viernes a viernes.
En esta oportunidad, se sumaron los estudiantes secundarios de la Intercolegial, que organizaron la marcha por el aniversario de la Noche de los Lápices y concluyeron en un acto común.
La Marcha es también la expresión de que la lucha en la Universidad de La Plata sigue viva a pesar de la guerra que le ha declarado el aparato radical. El rector pidió la intervención de la Bullrich para que obligue a los gremios docente y no docente a levantar los paros. Se pretende utilizar a la escuela primaria de la Universidad *uno de los puntales del paro* como caso testigo de la aplicación del decreto 480 del Ministerio de Trabajo, el cual definiendo a la educación básica como "servicio esencial", liquida el derecho de huelga de los maestros.
Franja Morada, por su lado, actúa como ariete de este movimiento, atacando los paros y la toma de Periodismo, que es hoy el epicentro de la lucha. El radicalismo, con el concurso de algunos reconocidos militantes del PJ, organizó incluso una avanzada fascista contra la huelga: aprovechando la angustia de algunos padres por la amenaza de pérdida del ciclo lectivo, se presentaron recursos de amparo contra las medidas de los docentes. A todo esto, la dirección del sindicato docente, alineada con la CTA, no organiza ninguna línea de defensa y se dedica a asustar a los docentes, vehiculizando así las presiones del gobierno y el rectorado.
La "Santa Alianza" para salvar el ajuste incluye al diario El Día, propagandista y agitador de los derechistas, y *una perlita* a Edelap, que le cortó el suministro eléctrico al edificio tomado por los estudiantes, por decisión política de la empresa, según confesó un funcionario.
Pese a que por las presiones aflojaron los paros, los estudiantes han tomado la posta, mostrando un nivel de movilización que no se veía desde la lucha del ‘95 contra la Ley de Educación Superior. En Periodismo, las masivas asambleas han desafiado, incluso, el pedido del rector a la Justicia para que se desaloje el edificio.
La marcha es una prueba de que en la Universidad está planteada la lucha por la huelga general para echar a los ajustadores de afuera y de adentro, y de que hay que convocar un Congreso Universitario de Bases con ese fin. Por su carácter de manifestación política y por la amplitud de la convocatoria, la Marcha de Antorchas es una prueba de que la región está madura para convocar una Asamblea de delegados como la propuesta por el Congreso de La Matanza. Sólo hace falta la decisión de hacerlo.