Los choferes de Transporte La Perlita paralizaron totalmente la línea (una de las más importantes de Moreno) por el despido de 20 choferes, y cortaron los principales accesos a Moreno, incluso las vías del ferrocarril; decenas de unidades fueron utilizadas de ‘barricadas’ para cercar el Municipio. Por sus métodos, esta lucha se coloca como una de las principales que desenvolvieron los trabajadores de la zona Oeste, y replantea el problema que ya había puesto en evidencia la lucha de TDO: el que lucha gana.

El argumento patronal para justificar los despidos es la merma del trabajo, dado que "El Colmenar" (Cooperativa trucha de transporte que compite por el piso de los recorridos de La Perlita) extendió sus servicios a barrios donde sólo llegaba TLP, esto con un servicio de 0,40 peso, un personal completamente precarizado, sin cargas sociales ni organización gremial. "El Colmenar" está administrado por ex concejales del PJ y se rumorea que también tienen metidos algunos billetes Laguna y Pierri. La empresa ‘trucha’ efectúa servicios como línea ‘común’, cuando su habilitación sólo es para servicios ‘charter’, es decir, que sólo puede llevar a los afiliados de la Mutual El Comenar. Esta disputa pone de manifiesto la gran crisis patronal.

Más de 300 compañeros se movilizaron frente a la municipalidad para reclamar la reincorporación de todos los despedidos. Los bombos todavía tenían en su mayoría la leyenda "Mariano West Intendente"; los mismos que lo apoyaban hace dos años, hoy los hacían sonar en su contra.

Finalmente, la larga jornada de movilización terminó con la noticia de que la patronal reincorporaba a todos los despedidos. Esta contundente victoria de los trabajadores plantea ahora otros problemas: primero, porque el conflicto no se ha cerrado segundo, porque es necesaria la recuperación del sindicato para los choferes.