Son aproximadamente 130 familias del barrio J.A. Cortejarena y aledaños.

En la mayoría de los casos viven allí desde hace más de veinte años. También hay vecinos con ocupación de cinco a dos años.

Estos terrenos fueron loteados y vendidos en las décadas del ‘40 y ‘50; en la mayoría de los casos no se llegó a escriturar.

En la década del ‘70 mueren los titulares de dominio (Ibáñez y Gerlero, Viel, Temperley —que son Copeda S.A.—).

A partir de allí quedan en situación de indefinición por la cuestión sucesoria; durante los últimos 30 años nadie definió la titularización, ni la parte sucesoria, ni los poseedores.

Tampoco se hicieron cargo del pago de ningún tipo de impuestos. Estos los pagaban los ocupantes. Durante estos años apareció una enorme cantidad de supuestos dueños —en su mayoría inmobiliarias de la zona.

El 28/12/01 el intendente West firma un convenio con el Dr. Juan Calvo (de Capital Federal, conocido inversionista de tierras en esta situación), por el cual la Municipalidad “perdona las deudas” de casi 1.000.000 de pesos a cambio de 130 lotes.

Esto no se cumple.

Y desde 2002 Calvo inicia acciones contravencionales (infracciones del artículo 61, para sacar a la gente).

Y desde la misma fecha la Municipalidad inicia juicio por apremio contra Calvo para cobrar la deuda.

El accionar de Calvo, junto a inversionistas y comerciantes de la zona, abogados (Dra. Evangelina Adón, de Moreno), es completamente mafioso, en contra de los que ocupan los lotes que a ellos les interesan.

Jamás mostraron escrituras que constaten su derecho.