Las últimas horas se ha producido un virtual levantamiento en la ciudad de Sucre contra el gobierno del MAS, el cual no es sino la expresión más exacta de la agudización de la lucha de clases en el país. La Asamblea Constituyente, la cual fue durante algún tiempo el escenario del acercamiento entre las tendencias reformistas y la derecha, por la dinámica de los hechos, ha superado los estrechos moldes en los que fue convocada. Una Constituyente en adelante sólo puede tener continuidad real bajo un programa revolucionario, pues cualquier posibilidad de acuerdo, de llegar a algún arreglo en términos pacíficos, ha sido sepultada.

La disyuntiva es clara: si las masas no se apropian en esta hora de la Constituyente y la dotan de un verdadero programa que destrabe la situación política, que sea bandera de la lucha contra las tendencias de la derecha, ingresaremos a la guerra civil en condiciones desventajosas, toda vez que la derecha, protegida por la política pactista ha ido ganando fuerzas.