“La democracia capitalista ha manipulado con mucha habilidad el tema del tránsito de la dictadura al régimen actual y lo ha hecho a través de sus instituciones más ´respetables´ como, por ejemplo, la Conadep que lanzó la consigna de Nunca Más.

 

Nunca Más es una amenaza, no una consigna emancipadora: ‘no luchen como lucharon las generaciones que hicieron el Cordobazo, si no quieren tener la respuesta que tuvieron esas generaciones, así que, muchachos, nunca más ocupaciones de fábricas, nunca más levantamientos populares, porque de lo contrario entonces van a tener la misma respuesta.

 

Mientras tanto, nosotros le pagamos a los fondos buitres, endeudamos al país, la inflación se va al 40% y los salarios y las jubilaciones tienen que esperar, no protesten. La única forma de que haya ´Nunca Más´, es erradicando el sistema social y político que, en su momento, para salvarse y defenderse, acudió a la dictadura militar”.

 

Este es un fragmento de la charla que Jorge Altamira dio, junto a Elia Espen, en marzo 2016 y que cito porque estamos viviendo momentos delicados para la burguesía nacional. De hecho, los trabajadores de AGR (Artes Gráficas Rioplatenses) están golpeando a las clases dominantes.

 

Esto no sólo se pone de manifiesto en el cerco mediático de los medios del Grupo Clarín y la censura al periodista Santiago Cuneo, de C5N. Un productor de ese canal, que prefirió mantener en reserva su identidad, dijo a Prensa Obrera que, más allá de la solidaridad patronal entre Cristóbal López (C5N) y Magnetto (Clarín), la emisora del empresario kirchnerista había hecho correr la versión de que no se podía poner en los graphs de la programación ninguna referencia al conflicto de AGR ya que, si eso sucedía, corría riesgo su ubicación en la grilla de Cablevisión, propiedad del Grupo Clarín.

 

Es notorio como Intratables TV impulsa la idea de la reconciliación de la población con las fuerzas represivas del Estado y trata de demostrar que los métodos de lucha de la clase trabajadora están agotados. Cabe destacar que uno de los panelistas del programa, Carlos Campolongo, en la campaña electoral de 1983, fue vocero del candidato a presidente Ítalo Luder quién, como presidente provisional, en 1975 (Isabelita estaba de licencia por enfermedad), firmó los decretos que habilitaban a "neutralizar y/o aniquilar el accionar de los elementos subversivos” dando así luz verde a los militares y a las bandas paraoficiales de la Triple A, para que torturen y asesinen a los treinta mil desaparecidos, el 75% de los cuales eran trabajadores.

 

El viernes 17 de febrero, en Intratables invitaron a Marcelo Vagni, quien estuvo un tiempo desaparecido durante la dictadura y, arrepentido de su pasado en la Juventud Guevarista contó, consternado, que militantes del ERP asesinaron al gerente y al subgerentes de la fábrica Miluz, sin contar que aquella gerencia fue responsable de los asesinatos perpetrados por la Triple A, en diciembre de 1974, de dos dirigentes de Política Obrera (hoy Partido Obrero): Jorge Fischer (secretario general de la Comisión Interna en aquella fábrica) y Miguel Angel Bufano, (quien también formaba parte de la Comisión Interna).

 

El problema en aquellos años para la burguesía no era solo la guerrilla armada sino, centralmente, frenar el periodo revolucionado abierto con el Cordobazo.

 

Fischer tuvo intervenciones destacadas en el Plenario Nacional Antiburocrático organizado días después del histórico “Villazo”, encabezado por los obreros metalúrgicos de Villa Constitución. Ese plenario, fue organizado en la perspectiva de estructurar nacionalmente al movimiento clasista que tenía su máxima expresión en esa ciudad y estaba liderado por los obreros de Acindar y apoyado por toda la población local. Cuando Perón realizó a su última convocatoria a concurrir a Plaza de Mayo el 12 de junio de 1974 para respaldar el ‘pacto social', basado en el congelamiento de los salarios, Jorge y Miguel Angel convocaron a asambleas para impulsar la posición de no asistir y ganaron la votación en siete de las ocho secciones de la fábrica.

 

El “Nunca Más” de la Conadep solo fue demagogia de la burguesía. Decían que, con la democracia, “Nunca Más” iba a haber desaparecidos, cuando hay más de doscientas personas de las cuales se desconoce su paradero y más de cuatro mil seiscientos muertes a manos de las fuerzas represivas. Todo esto en democracia.

 

Pero el hecho de que los trabajadores de AGR–Clarín, lleven más de un mes y medio de ocupación de la planta en defensa de sus puestos de trabajo, también es una clara muestra de que la clase trabajadora no le teme a esa extorsión y que se está poniendo de pie para cambiar la historia.

 

Justicia por Fischer y Bufano, por los demás asesinados de la Triple A y por los demás crímenes de Estado de ayer y hoy.