No es árabe, no usa cimitarra, no es menemista pero merecería serlo. Es tan autoritario como Márbiz y se llama Badía y tam­bién corta cabezas. Pero en forma discriminada porque en Radio Municipal dejó a todos los amigos políticos. Como, por caso, Silvano Lanzieri, ex diputado de la UCR en la provincia de Buenos Aires y actual concejal de la Alianza en Lanús; también, como Badía, pro­pietario de una radio privada. Cuando lo acusan de censor, se defiende con la muletilla “se ter­minó el contrato”. Pero el contra­to no se termina para el pariente de Lopérfido (Quique Duplaa) ni para los muchachos del comité (basta observar la programación de AM de Radio Municipal).

Señores legisladores: es hora de realizar una investigación a fondo en Radio Municipal. Hay censura, hay discriminación, hay autoritarismo y falta de diálogo. Hay terror con el personal (el 60% es contratado, con lo cual el pro­pio Estado promueve el trabajo en negro). Mientras tanto, han toma­do personal adicto, con lo cual se infiere que es mentira lo de la fal­ta de presupuesto. Badía, como ya lo hicieron otros funcionarios de la administración anterior (recor­dar por caso a Frega), lleva el rumbo de la privatización. Y no queremos eso para Radio Munici­pal. Tampoco queremos acomoda­dos y ñoquis. Queremos buenos programas.

Oyentes en defensa de Radio Municipal (si es necesario, volveremos a realizar un abrazo a la emisora como tantas otras veces). Coordinadora de oyentes en defensa de Café, Bar, Billares.

26 de octubre, Día de los Cafés de Buenos Aires: Día de duelo por la censura ejercida por Juan Alberto Badía contra Ricardo Horvath y su Café, bar, billares ra­dial.