La verdad de la milanesa

Menem no sólo es un incapaz entreguista y vendepatria, sino que también es un falsario muy astuto.


Bajó del norte, este Alí Baba con sus 40 ladrones, y con sus falsas promesas logró hacerse votar.


Instauró el gobierno más corrupto de toda nuestra historia, pero nunca deja de utilizar la colaboración de todo incauto, bien conceptuado.


Se llena la boca, diciendo que en el país hay mucha libertad de prensa, pero tiene organizada una cohorte de adulones y chupamedias que ya son una astuta mafia de matones a sueldo.


A todo periodista, a todo fotógrafo, a todo diario, a toda emisora de radio y TV que pretendan decir algo, de la verdad de la milanesa, él con su mafia les hace poner piedras en sus caminos, muy sutilmente, desde provocarles interferencias electrónicas, amenazas, como lo hizo con este último el de José Luis Cabezas.


Y además, este astuto falso demócrata, cuando surge en el pueblo un imberbe grupo con justa rebeldía, y foquista acción, él los hace infiltrar con algunos de sus mafiosos y los utiliza contra el pueblo, cuando el pueblo pretende movilizarse y organizarse pacíficamente y democráticamente, para manifestar su protesta y su propuesta, y todavía después, él se queja de que nadie le presenta propuestas, y que esos grupos violentos son la ultraizquierda.