Las viudas toman vida propia


Con relación al último editorial de Prensa Obrera, quiero hacerles llegar un par de observaciones. Me parece que el anuncio de Telerman es el último clavo en el ataúd del intento de formar una fuerza transversal afín al kirchnerismo. K ha tenido que ir con el viejo PJ en todas partes, pero las viudas del transversalismo han tomado vida propia. Llamándose kirchneristas, no se quedan quietas y toman sus propias decisiones. Cierta idea de que el Presidente controla todo, este ejemplo la contradice. Al tratarse de un gobierno de camarillas, éstas presionan por donde más les conviene, y si tienen que actuar en contra de los intereses de otra camarilla (en este caso la de Alberto Fernández en la Capital), lo hacen. Es interesante hacer notar que el Presidente no ha salido a atacar a Telerman, sólo hizo una crítica tibia; desde ya no se quiere despojar de ninguna prenda y espera negociar por si hay una segunda vuelta. Mientras las peleas entre los que se llaman K no jodan los interesen capitalistas, éstas se van a seguir dando. Lo vemos en Tucumán entre Alperovich y Juri.