Correo de lectores
21/11/1996|520
Movimiento contra el racismo, la xenofobia y la discriminación
Declaración
Protestamos enérgicamente contra el abierto sabotaje al proceso de paz en Medio Oriente, practicado por el gobierno de Israel y sus huestes extremistas.
Es evidente que no puede haber paz, si las tierras habitadas por árabes que les fueron quitadas con violencia, no son devueltas. Los asentamientos judíos en tierras árabes fueron establecidos provocativamente con el confesado fin de usurpar esas tierras. Por lo tanto, deben desaparecer.
Menos aún puede aceptarse que, “para poder subsistir en un medio hostil”, estén armados. De ese ambiente precisamente procedía Baruj Goldstein, quien asesinó a decenas de musulmanes, mientras rezaban en una mezquita.
Ninguna referencia mitológica puede justificar la permanencia de avanzadas armadas judías en Hebrón. Mucho menos la alusión al patriarca Abraham, que es considerado antepasado no sólo por los judíos, sino también por los árabes.