CÓRDOBA

En Prensa Obrera Nº 1319 apareció el artículo “Una ley para los escritores”. Los militantes de Córdoba de la Fracción de Cultura del Partido Obrero consideramos que ese artículo abre una importante perspectiva política con respecto a la delimitación del kirchnerismo (y sus socios del Frente de Artistas y Trabajadores de la Cultura, formado en el CCC del Banco Credicoop), con todas sus “batallas culturales” y sus “cartas abiertas”. En primer lugar, porque esas “batallas” no priorizan la protección a los escritores -ya sean éstos profesionales o en vías de formación- ni a la producción literaria. Por el contrario, son batallas para limitar o derogar los derechos económicos e intelectuales de los autores a favor de las ganancias de las empresas editoriales, tanto en el libro en papel como en la edición digital.

Se trata de una política de arrinconamiento, destinada a preparar la oferta de cooptación y discriminación política. Así, hemos realizado debates abiertos con escritores locales para impulsar un proyecto de Ley para los escritores en la provincia de Córdoba, que sea presentado por la bancada del FIT en la Legislatura.

En Córdoba, los programas de ayuda, premios y ediciones del Estado provincial y municipal van del incumplimiento, liso y llano, al retraso considerable en su convocatoria y aplicación. ¿La excusa? Falta de presupuesto. Buitres sí, cultura no. Entonces, un proyecto de Ley para los Escritores debe establecer que cada programa, beneficio o beca, figure con el monto estipulado y su detalle en el presupuesto estatal anual correspondiente, a fin de garantizar los fondos para aplicarlo. También debe avanzar sobre la arbitrariedad con que se distribuyen los presupuestos destinados a cultura y adoptar criterios objetivos -como el currículum- para la asignación de los fondos, claramente establecidos en las respectivas ordenanzas y leyes, a fin de evitar la cooptación y la discriminación política o de otra categoría.

Por la protección y promoción de la producción literaria nacional.
Por los derechos profesionales, la libertad de opinión y la protección social de los escritores.

Fracción de Cultura
del PO Córdoba