¿Qué tragedia? La masacre de Cromañón


Apurado por el cierre de recepción de artículos para la Prensa Obrera y guiado por el dogma fundamentalista de todo buen revolucionario de medio pelo, el de que es más fácil ver el error ajeno que la propia capitulación, no opuse reparos a vencer cualquier obstáculo que impidiera mi llegada al cyber.


 


Atropellé a una viejita que venía de cobrar su sueldo de 200 pesos, me tuve que cruzar a la vereda de enfrente porque había una boliviana vendiendo ajos (seguramente tiene algún pariente en El Alto) y me puse a discutir con unos piqueteros en la calle que no me dejaban pasar.


 


¿Si lo de Cromañón es una tragedia deberíamos hacer peregrinaciones y no marchas para que “el Señor nos proteja”? Ahora, si como a los trabajadores de la construcción, los mineros de Río Turbio, las guerras, etc., la muerte de casi 200 chicos es consecuencia directa del sistema capitalista, que antepone la ganancia, la acumulación de capital sobre las condiciones de vida y de la misma vida de los trabajadores, y el pueblo en general, tenemos que hablar de masacre .


 


La alternativa obrera y socialista es una alternativa de vida no sólo a la barbarie si no a la muerte.


 


Me despido rápidamente porque me olvidé de pegarle a mi mujer.