Sobre “¿Quién mató a Mariano Ferreyra?”, la película

Estimados compañeros: ayer fui con unos amigos a ver la película "¿Quién mató a Mariano Ferreyra?". Temía encontrarme con un documental meramente "panfletario" (con perdón de los panfletos) o apologético, pero me encontré con una gran película, difícil de catalogar: no es un documental, aunque tiene testimonios documentales; es una ficción pero basada -casi en su totalidad- en los hechos ocurridos. Cuenta con la participación -como actores o como extras- de los militantes que de verdad estuvieron ese día en la movilización que terminó con el crimen de Mariano, pero también colaboraron en la película actores profesionales con un compromiso militante, y Periodistas -con mayúsculas- (Caparrós, Rojas, Tenembaum y Schiller) que en la peli actúan de periodistas y que de verdad han jugado un rol esclarecedor y comprometido para denunciar la trama política-sindical-empresaria que está detras de este crimen.


La película, además, mezcla escenas verdaderas (documentales de los noticieros) con escenas ficcionadas, actuadas (aunque algunas son actuadas por los propios protagonistas de los hechos ocurridos); mezcla el audio real de una entrevista a Pedraza con las preguntas del periodista en la ficción (Caparrós). Es difícil a veces distinguir la "realidad" de la "ficción", por la cercanía de lo ficcionado con los hechos reales. Muy buena la música de toda la película y las canciones que recuerdan a Mariano. Me pareció sumamente esclarecedor cómo se explica el tema de la "tercerización", la complicidad del Estado con los negocios de los empresarios con nombre y apellido (Roggio, Romero de Emepa, Cirigliano, Taselli, etc.) y el rol criminal de la burocracia sindical.


La película relaciona también el crimen de Barracas con otros crímenes políticos: el llamado "tiroteo de la Real" (1966), donde murió el burócrata Rosendo García (UOM) y fueron asesinados dos compañeros de la izquierda peronista (Blajakis y Zalazar); más cercanos en el tiempo, los crímenes de Kosteki y Santillán (2002). Recuerda en varias ocasiones al compañero Rodolfo Walsh por su investigación de los hechos de la Real.


Con relación a este tema, quiero rescatar algo que forma parte de la historia del PO: en aquel suceso, la prensa del sistema, la policía y la burocracia acusaron y persiguieron a los hermanos Villaflor (militantes de la resitencia) como responsbales por la muerte del burócrata Rosendo Garcia. Años más tarde, Raymundo Villaflor sería uno de los maximos dirigentes del PB (Peronismo de Base) y de las FAP (Fuerzas Armadas Peronistas), en 1979 fue secuestrado y asesinado por los militares. En 1983, su padre, Aníbal Clemente Villaflor, fue candidato a intendente de Avellaneda en las listas del Partido Obrero y varios de los sobrevivientes de la organización que lideró Villaflor nos integramos al PO en la lucha por la alternativa independiente de los trabajadores, nada se pierde, se aprende de los errores, así avanzamos.


Excelente la distinción final que realiza la película entre las perspectivas negativas que planteaba Walsh para castigar a los responsables y la realidad actual: con muchos de los responsables sentados en el banquillo y a punto de ser condenados, con una lucha que ha logrado apoyo popular, con una reivindicación de la verdadera militancia revolucionaria de la juventud (personificada en Mariano, como antes en Maxi y Darío) y el enraizamiento de una organización obrera como el PO en el movimiento social.


Saludos.