Trelew y la militancia de los ’70


Desde hace un tiempo, tenía la necesidad de rendir homenaje, a través de estas páginas, a quienes fueron mis compañeros de militancia en la juventud, y de paso que sirva de experiencia para la militancia actual, de los “errores” cometidos en esa época. Cada vez que se acerca el 24 de marzo, nos sensibilizamos y, querramos o no, empezamos a recordar a los compañeros caídos.


 


Viendo ayer el estreno de la película “Trelew”, base naval que sigue cumpliendo las mismas funciones que en la época de Lanusse y Videla, acusada de espionaje a la militancia de esa zona, me decidió a hacerlo.


 


Este documental hace recordar las ganas de cambiar este mundo capitalista que había, y que algunos seguimos manteniendo; mientras otros se pasaron al campo del enemigo, ya sea colaborando con la burocracia sindical, o incluso algunos pasándose al cuerpo de represión, u otros haciéndose “socios” con quienes habían secuestrado.


 


De lo que no cabe dudas es de que en ese entonces los jóvenes no dudábamos en poner el cuerpo y en comprometernos permanentemente. Con esa idea marchamos el 20 de junio del '73 a Ezeiza, donde la derecha masacró a miles de compañeros de nuestras filas, y decenas de ambulancia trasladaban apilados a compañeros asesinados; o la vez que fuimos a reclamar a Plaza de Mayo el 1° de Mayo del '74 “qué pasa, general, que está lleno de gorilas el gobierno popular”, o “Perón evita la patria socialista”. Posteriormente, comprendí que la consigna era correcta: Perón evitó la patria socialista.


 


Lo que fundamentalmente quiero destacar era el grado de improvisación y falta de caracterización política que había en estas organizaciones, ya que muchos cayeron por confiar en este Estado burgués y no verlo como nuestro enemigo. Los que estuvimos detenidos y zafamos, tenemos la obligación, por estos compañeros y por los trabajadores, de construir un verdadero partido, un partido que represente nuestros intereses y no seguir conciliando con quienes son responsables de nuestra miseria, como hacen muchos, dirigentes políticos y sindicales que ayer estuvieron en la sala del cine, aplaudiendo esta película.


 


A pesar de mis varios años de militancia en este Partido Obrero, igualmente quiero agradecer se me haya permitido la posibilidad de canalizar mi militancia, y no ser un fundido más, en un caudal que crece día y día, y que nos llevará a la victoria, y si no como dijo un compañero al final de nuestra vida podremos decir “al menos lo intentamos”.


 


¡¡SOCIALISMO O BARBARIE!!