-Exclusivo de internet

Queridas compañeras y queridos compañeros: Apenas cometido el asesinato de Mariano, nuestro compañero, amigo y maestro Ricardo Plaul nos hizo llegar esta poesía cargada de sentimientos revolucionarios. Desde el dolor, con la firmeza de sus convicciones, este sembrador de soles nos alivia la tristeza y refuerza nuestras voluntades solidarias. Omar Dalponte

Para guardar como testimonios de unt iempo, nuestro tiempo…

Mil gracias a Ricardo, acompañamos tu canto.

Una gota de sangre cayó en la tierra del trabajo,

Mariano Ferreyra era su nombre

y militaba en la fe de la Revolución.

 

Temprano tocaron la campana

Y partió en el tren de sus sueños libertarios,

Un abrazo de hermanos lo acompaña

en la morada de la lucha, en el vagón

de la utopía inconclusa.

 

Su camino se ensancha ya en las calles,

mil voces corean sus consignas,

hay un sudor de libertad en sus rostros,

un pliegue de justicia en sus puños.

 

Un obrero ha caído y un solo grito

lo recuerda, lo levanta, lo fragua

en el bronce fraterno de la lucha

que embellece la vida, que dignifica al Hombre,

que arrebata palabras y las lanza

a los vientos y llanuras de la América toda.

 

Acompaña mi verso compañero:

Hoy, ha caído un obrero.