Ojo Obrero – Propaganda de la revolución

Hace aproximadamente un año (mayo de 2001) creamos el Ojo Obrero con el objetivo de registrar el proceso político que vive nuestro país; cooperando así desde nuestro lugar (la realización audiovisual) con materiales que sirvan para plantear una salida política propia de los trabajadores.


Del análisis de la actual situación, del debate político, y de la necesidad de pertenecer a una organización con independencia de la burguesía, es que decidimos incorporarnos a LuchArte (los piqueteros de la cultura) y al Polo Obrero.


Nuestra caracterización sobre la crisis terminal del capitalismo, el fracaso mundial del centroizquierda (que iba a confirmarse en nuestro país con el Argentinazo de diciembre pasado), y la proyección de una situación revolucionaria, no sólo se confirma día a día, sino que nos ha colocado en un lugar de excepción dentro de nuestra actividad.


Los materiales del Ojo Obrero no sólo han trascendido dentro del movimiento piquetero y los sectores en lucha. Se organizaron también charlas y proyecciones sobre la situación revolucionaria argentina en las ciudades más importantes del mundo (“Argentinazo” se proyectó en Nueva York, Londres, Madrid, Atenas, Berlín, y quién sabe dónde más). Hasta los medios burgueses dieron cuenta de nuestra existencia (Clarín, Página/12, Día D, Periodistas, Punto Doc). La trascendencia de los videos producidos también se extiende al ámbito judicial, ya que se utilizaron imágenes para llevar adelante el juicio sobre los asesinatos del 20 de diciembre y, a instancias de los abogados del Polo Obrero, del 26 de junio en Puente Pueyrredón.


 


Convocatoria


Consideramos que los materiales audiovisuales cumplen hoy una función muy importante en el desarrollo de la lucha de clases, como documentos formativos, superadores de la limitación que impone el sistema capitalista a las masas explotadas, que se refleja en el altísimo y creciente índice de analfabetismo.


Llamamos a los compañeros de todos los rincones del país que quieran sumarse a nuestro trabajo en cualquiera de las áreas que lo conforman (producción, proyección, distribución). No es excluyente no poseer una cámara, ya que la actividad del Ojo Obrero puede empezar a coordinarse a partir de la organización de proyecciones; instancia en la cual nuestros materiales desarrollan el máximo de su potencial: el debate.


La producción y distribución de estos materiales debe servir a colectivizar experiencias y difundir la lucha en todo el país. Logrando de este modo que la actividad no se vea reducida sólo a Capital Federal y Gran Buenos Aires.


Esperamos que se contacten con nosotros para poder coordinar en un Ojo Obrero Nacional que tome en sus manos la promoción del Polo Obrero y del Bloque Piquetero Nacional como referencia política para las masas; y convertirnos de este modo en los realizadores de la propaganda de la revolución socialista en Argentina y en el mundo.