Disfrutar, aprender o producir arte está vedado hoy al conjunto de los trabajadores y es cada vez más dificultoso para los artistas. Altos precios en las entradas, políticas de estado que privilegian el mercado y el turismo, vaciamiento de las escuelas artísticas y privatización de los espacios como el teatro San Martín, se suman a los cierres de Centros Culturales que encabezó el macrismo.

 

Pero no todo al panorama es tan oscuro. Los artistas visuales, cineastas, teatristas, escritores, fotógrafos, músicos y estudiantes de arte que conformamos el Frente de Artistas nos hemos dado a la tarea de construir un espacio propio en el que el debate político, junto a las producciones artísticas, se transforme en un eje de agrupamiento de los artistas que luchan por transformar la realidad.

 

En la etapa política del ascenso de la izquierda y su fusión con el movimiento obrero reivindicamos el derecho de los artistas a organizarse y el de los trabajadores de acceder al arte. Esta idea, fusión al fin también, encontrará su faro en León León.

 

Talleres, proyecciones, obras, cursos, debates, espectáculos musicales, presentaciones de libros, etc…, conformarán la grilla del centro.