Las últimas semanas el Ojo Obrero participó en cada una de las jornadas de lucha del movimiento piquetero.

El jueves 26 de mayo, durante el acampe frente a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad, cientos de compañeros se acercaron a la pantalla, haciendo de la Avenida de Mayo un enorme cine que llamaba la atención de todos los transeúntes. A pocas horas de los ataques de Kirchner por Radio 10, el clima era tenso, el operativo policial era descomunal y montaban provocaciones permanentes (detrás de la pantalla los guardias de Infantería se ponían en posición de ataque al ver que centenares de personas se acercaban a la misma; los polis estaban muy nerviosos). ¡Los periodistas no podían creer lo que veían!, venían a filmar la proyección. Algunos compañeros responsables de los piqueteos comentaron que la gente que cruzaba la Avenida de Mayo se detenía al observar la pantalla iluminada en plena avenida, incrementando notablemente el trabajo con la prensa. Varios vecinos y turistas se sentaron, prensa en mano, entre los compañeros de las distintas agrupaciones a ver el documental sobre la masacre de Cromañón “Ni la bengala, ni el rocanrol”. Luego se hicieron presentes los estudiantes luchadores de la Fuba piquetera con un encendido apoyo a la lucha unitaria: minutos después los delegados de cada organización bajaron a la calle con la novedad del triunfo.

El 6 de junio fue una cita de honor el multitudinario acampe del Puente Pueyrredón. Estuvimos registrando, con el ojo piquetero de nuestra cámara, desde la mañana, una jornada unitaria de lucha por los 350 pesos y el aumento para los trabajadores estatales. Desafiando la lluvia y la presencia policial, el movimiento piquetero mostró un avanzado nivel de organización: en cuestión de minutos había decenas de carpas, mesas y ollas en el fuego. Al caer la noche, la logística piquetera del Polo Obrero garantizó una enorme proyección donde los compañeros de todas las corrientes se acercaron a ver los documentales del Ojo, como “Argentinazo” o “Parmalat en lucha”, con la presencia de algunos compañeros de Parmalat en el acampe. Cerramos la medianoche con “Piqueteros, carajo!” en medio del Puente Pueyrredón (en ese momento hubo un especial interés de los compañeros de la CCC, que se acercaron al “cinemóvil piquetero”). Los aplausos de casi 500 compañeros eran motivados por la impresionante lucha reflejada en la pantalla, donde el movimiento piquetero hizo retroceder al gobierno de Duhalde. Los compañeros se retiraron a cenar contentos. Cuando nos dispusimos a desarmar la pantalla se acercaron unas compañeras del Teresa Vive que se acababan de enterar de la proyección; quedamos en que en las próximas jornadas íbamos a poder compartir nuevas proyecciones y nuevas luchas. ¡¡¡Piqueteros, carajo!!!