Cultura

11/1/2021

Farewell amor: una misma mirada para distintas historias

Un largometraje sobre la guerra civil en Angola y las familias migrantes.

En el festival de cine Sundance 2020, la directora y guionista Ewka Msangi estrenó su primer largometraje “Farewell amor”. Desde diciembre se la puede encontrar en la plataforma no muy conocida pero recomendada: Mubi. Abordada desde la sensibilidad y empatía, esta historia de inmigrantes africanos no deja de ser la realidad de cientos de miles de familias que escapan de su país de origen en busca de una realidad “mejor”. Desde los actores hasta la música, todo está minuciosamente pensado y deja entrever un simbolismo identitario.

La película narra la historia de Walter (Ntare Mwine), un angoleño, que tras diecisiete años de separación logra traer a su esposa Esther (Zainab Jah) y a su hija adolescente Sylvia (Jayme Lawson) a vivir con él a Estados Unidos. Escapando de la guerra civil de Angola, este padre de familia, se instala en Brooklyn tratando de rehacer su vida.

Desde la primera escena en el aeropuerto se puede notar las sensaciones de afecto y extrañeza, ya que se deja al desnudo el conflicto principal que se desarrolla a lo largo de esta obra: ser familia y extraños a la vez.

Esta historia es narrada desde los puntos de vista de los tres protagonistas. Este recurso nos ayuda no solo a acompañar a los personajes, sino también a mostrar las distintas miradas de tres generaciones atravesadas por una misma problemática: estar lejos de casa. Sin embargo, más allá de los conflictos y desencuentros hay algo que los une y los remonta a sus orígenes: la pasión por la música y el baile de su región.

La guerra civil de Angola fue un conflicto armado que se prolongó por 26 años, desde 1975 hasta 2002. Las causas fueron varias, pero la más importante tuvo lugar cuando Angola decide independizarse de Portugal, siendo una de las últimas colonias africanas en lograr su independencia, dando origen así a una lucha de poder dentro de su territorio.

Los principales protagonistas fueron el Movimiento Popular por la Liberación de Angola (MLPA) y la Unión Nacional por la Independencia Total de Angola (UNITA). Por un lado, el MPLA contaba con el apoyo de la Unión Soviética y Cuba. A medida que ganaron terreno, se empezó a instaurar un sistema político económico y centralizado, como también la expropiación y nacionalización de las empresas privadas. Por otro lado, viendo el escenario que estaba deviniendo, Estados Unidos y Sudáfrica comenzaron a apoyar al grupo adversario, intensificando la causa.

Esto tuvo consecuencias muy arraigadas como el exilio de muchos oriundos, un saldo de muertes incontables y una economía muy golpeada.

En conclusión: el suceso que nos muestra la película no es más que un arquetipo de muchas familias que tuvieron que dejar su lugar para buscar un futuro mejor, luchando todo el tiempo con las trabas burocráticas y un sistema que discrimina lo ajeno.