Cultura

25/6/2020

Trabajadores de la cultura y artistas marchamos a Plaza de Mayo

Fede Imas Ojo Obrero Fotografía

Este mediodía trabajadores de la cultura y artistas nos movilizamos a Plaza de Mayo, llevando al centro del poder político nuestros reclamos de un subsidio de $30.000 mientras dure la pandemia, el no pago del monotributo durante el mismo período, la suspensión del pago de alquileres de locales vinculados a la actividad cultural, entre otros.


Están presentes las agrupaciones Trabajadores Audiovisuales Precarizades (TAP), Actuemos, Musicos Organizados, Trabajadores de la Fotografía, Trabajadores de la Cultura Conurbano Sur, que debatieron en sus asambleas participar.




Llegando casi a los 100 días de cuarentena, la amplia mayoría de lxs trabajadores del sector no hemos recibido ingreso económico de ninguna índole. En muchos casos no aplicamos para las distintas líneas de beneficios que alcanzan a otrxs trabajadores, porque desarrollamos actividades inconstantes o muy precarizadas -sin contratos y/o fuera de convenios-.


Es frente a este contexto límite que entendimos que no había más alternativa que -poniendo nuestra integridad física en riesgo en el marco de la pandemia- marchar físicamente para hacer oír nuestros reclamos. Previo a la marcha  de hoy, nos hemos concentrado frente al Ministerio de Cultura, y movilizamos con sectores de trabajadores de cine al Ministerio de Trabajo. La burocracia sindical y el Estado naufragaron en su intento de hacernos deponer nuestra voluntad de movilizar, y prácticamente en simultáneo con ambas movilizaciones tuvieron que salir a hacer anuncios de que sería inminente la salida de un bono de Cultura. Esto confirmó aún más lo acertado de la medida, y no hizo más que impulsarnos a seguir por este rumbo.



Crece la organización


La situación para muchxs compañerxs ya es límite. Comienzan a presentarse condiciones angustiosas, dramáticas, con compañerxs que ya ingresan en situación de emergencia alimentaria, y demás necesidades básicas insatisfechas. En simultáneo crecen desde las bases de los gremios las organización de trabajadores autoconvocados. Son la respuesta al inmovilismo de las conducciones de sus sindicatos, que en todo este tiempo han abandonado cualquier iniciativa de lucha y han evitado por todos los medios convocar a asambleas que abran la deliberación en el seno de los gremios –que, claro está, podrían cuestionar este inmovilismo. Lxs autoconvocadxs, en muchos casos, son compañerxs que apoyaron (e incluso aún defienden) al gobierno nacional, pero que colisionan con las burocracias ultra oficialistas. Es que la lucha que estamos encarando confronta objetivamente con la ausencia de medidas de lucha por parte de estas burocracias y, aunque incipientemente, se va percibiendo también la responsabilidad del gobierno nacional.




 


En este proceso se van sacando profundas conclusiones: que la pandemia no hizo más que agudizar el cuadro de retroceso que viene sufriendo el poder de compra de nuestro salario, y que, combinado con la precarización laboral, nos confrontó con la cuarentena sin recursos para poder atravesarla sin pasar penurias. La naturaleza inconstante de nuestro trabajo incluso debiera considerar un ingreso extraordinario que nos permita atravesar períodos sin trabajo. Hace mucho tiempo que esto no es así.




Se va delineando un sendero que plantea una salida; es el que van trazando las agrupaciones que están en pie de lucha, tanto las que existían previas a la pandemia como las que fueron surgiendo al calor de la intensa actividad que registran las bases de los gremios. Con una orientación política independiente del gobierno y los bloques patronales, van marcando el camino para conseguir las reivindicaciones de todo el sector.


Llamamos a todxs lxs trabajadores de la cultura y artistas a sumarse a esta lucha hasta conseguir las respuestas a nuestras demandas, que en la crisis por la que estamos atravesando no admiten más demoras.