Educación

10/3/2023

Ante los nuevos datos sobre el “fracaso escolar”

El fracaso es de todos los que nos gobernaron.

Fracaso escolar.

En medio de la ola de calor que convirtió a muchas escuelas en lugares inhabitables, la crisis educativa vuelve a ser noticia por un informe del Observatorio Argentinos por la Educación que dice que sólo el 43% de los estudiantes llega a 6° grado a tiempo y con los aprendizajes esperados.

Disparen contra la escuela

En verdad el informe no aporta demasiada información. Los autores combinan los resultados de las pruebas Aprender 2021 (que ya fueron motivo de debate público el año pasado) con el desgranamiento (menor) que se sucede en una cohorte entre 1º y 6º grado para llegar a la cifra alarmante del 43%.

No es que la realidad de la escuela no sea alarmante, pero hay una tendencia a lanzar cifras sobre el “fracaso escolar” sin hilar en las causas y responsabilidades de esta realidad o achacándoselo directamente a las y los docentes. Debemos ser cuidadosos frente a este tipo de campaña, porque bajo la premisa genérica del fracaso de la escuela se justifican las reformas que no hacen más que profundizar la degradación de la enseñanza y del trabajo docente. De la misma forma que el mal funcionamiento de los servicios públicos se usó para justificar las privatizaciones en los 90, que llevaron al descalabro actual de cortes y tarifazos.

No tienen nada para aportar

Que muchos estudiantes llegan a la secundaria sin los conocimientos básicos que deberían haber adquirido en la primaria, lo sabe cualquiera que trabaje en una escuela. La pregunta es cómo llegamos a esto, y cómo salimos. En este punto ni los Argentinos por la Educación ni los funcionarios entrevistados por los medios tienen nada para aportar.

La autora del informe, Melina Furman, responde en Clarín (9/3), como si dijera alguna novedad, que “es esencial que los chicos aprendan a entender” y luego se despacha contra “la escuela transmisiva” y los docentes que “están dictando mucho tiempo”. Pero este es el discurso oficial hace 40 años, con el que se han adornado todas las reformas educativas y que nos llevó a la crisis actual.

En Infobae (9/3), el subsecretario de Educación de Lomas de Zamora responde que es fundamental “que las y los docentes tengan horas de investigación, espacios para compartir con otros docentes”. ¡Como si no fuera parte del gobierno que condena a la docencia a la miseria y que está imponiendo una jornada laboral docente de 10 u 11 horas con la incorporación de la 5ta hora! En La Nación (9/3), Marcelo Rabossi hace hincapié en la estimulación temprana y en la buena alimentación ¡en la Argentina donde la mitad de los niños son pobres!

¿Quiénes son responsables?

Una crítica a la situación actual de la escuela que intente dar una salida no puede dejar de señalar la responsabilidad de los gobiernos por partida doble: por un lado, por el ajuste presupuestario y las reformas que vienen precarizando a la docencia y a la enseñanza y, por otro, por la situación de pobreza a la que condenan a la niñez y a la juventud, lo que significa un condicionante enorme para cualquier tarea educativa.

El Observatorio Argentinos por la Educación no podría nunca hacer este cuestionamiento porque está conformado por ex ministros responsables de esta debacle y auspiciado por los principales grupos capitalistas del país, incluyendo empresas como Toyota, que milita la descalificación laboral y educativa, y bancos como Santander que es accionista de la privatización educativa en toda América Latina. Un dato de color: entre las empresas que acompañan a Argentinos por la Educación está también el grupo Irsa, que se preocupa tanto por la educación que acaba de comprarse el edificio donde funciona la UniCABA y la Escuela Técnica 15.

Que se escuche la voz de las escuelas

Que en plena ola de calor ninguno de los académicos y funcionarios entrevistados haya hecho una mención a las condiciones materiales en las que se desarrolla el proceso de enseñanza-aprendizaje desnuda lo lejos que están de la realidad de las escuelas. Incluso hay un estudio reciente que vincula la infraestructura escolar con los aprendizajes. Pero para encontrar las dificultades que enfrenta la educación no hacen falta tantas estadísticas, alcanza con escuchar lo que dicen estudiantes y docentes.

Necesitamos escuelas en condiciones, climatizadas, sin ratas y alacranes. Necesitamos terminar con la sobrecarga laboral, poder trabajar un solo turno y cobrar un salario que alcance. Necesitamos libertad de enseñar contenidos y de evaluarlos. Necesitamos que nuestros alumnos coman, que se puedan comprar útiles y libros. Necesitamos un apoyo real, con más docentes, con equipos de orientación para abordar dificultades específicas. Necesitamos menos chamuyo y más recursos.

Los políticos y las fundaciones capitalistas no van a resolver esta agenda, porque en el fondo les importa un cuerno la educación. Está en nuestras manos, de docentes, de estudiantes y del conjunto de los trabajadores, darle una salida a la crisis educativa.

https://prensaobrera.com/educacion/se-derritieron-los-190-dias-de-clases