Según informó el Ministerio de Educación porteño, “en el marco del programa de prácticas educativas en ambientes laborales, esta semana 2.500 estudiantes de 21 escuelas de gestión estatal y de nueve de gestión privada comenzarán el curso de educación financiera”. El programa obligatorio abarcará en toral a 29.400 chicos de 442 establecimientos educativos de gestión pública y privada durante el 2022.

Bajo el argumento falaz del “desarrollo de nuevas capacidades”, de la “toma de decisiones y autonomía”, y de “estimular el pensamiento crítico y la creatividad”, el jefe de gobierno entrega a les estudiantes a una situación de extrema explotación laboral por parte de empresas. Las prácticas para estudiantes secundarios en CABA serán de 120 horas, de carácter obligatorio y gratuitas. La medida se encuadra en las reformas (anti)educativas llamadas Secundaria del Futuro (SdF), la cual representa la profundización de la Nueva Escuela Secundaria (NES). Durante 120 horas cátedra, los estudiantes cambiarán las aulas por oficinas de organizaciones, fundaciones y multinacionales, que cuenten con áreas vinculadas a algunas de las 13 orientaciones académicas que poseen las 116 escuelas de gestión estatal y las 326 de educación privada.

Al respecto, la legisladora del Frente de Izquierda-Partido Obrero y secretaria gremial de Ademys, Amanda Martín, señaló que “esta propuesta descalifica la educación” y consideró que “la relación entre teoría y práctica debe darse en el ámbito educativo, bajo dirección de docentes y estudiantes” (Télam, 19/4).

Amanda Martín, que también de docente de nivel medio y superior, indicó en IP: “muchas de estas horas van a ser realizadas por fuera en ONG, multinacionales, no tienen nada que ver con los contenidos educativos. Una cosa es lo que necesitan los escuelas, otras cosas son las que introducen Larreta y Acuña, que nada tiene que ver con las necesidades reales”. Estas medidas no van a generar nuevos puestos de trabajo ni empleo, sino que serán prácticas en lugares como la Unicaba y empresas.

Las reformas educativas vienen a imponer modificaciones profundas que apuntan a adaptar la educación a un mundo laboral precarizado, que desconoce cualquier conquista por parte de les trabajadores y sus convenios colectivos, en un marco de avance del gobierno en reforma laboral. La falta de formación es otra pata argumental del gobierno de la Ciudad para explicar la desocupación en la juventud.

La aplicación de estas prácticas no rentadas se dan en un contexto de ataque a la educación publica porteña. En medio del curso del debate sobre la reforma del estatuto docente y la titularización de un sector de docentes de nivel medio, la docencia afectada continúa reclamado por la separación de los temas referidos y la titularización del conjunto de la docencia, vulnerada en su derecho a la Carrera Docente y a la estabilidad laboral. Entre ella la docencia de terciarios quienes, luego de las clases públicas de la semana pasada, convocan este mismo jueves para exigir la titularización de sus cargos. El combativo sindicato Ademys convoca a un cese de actividades en sintonía con el reclamo y concentración en la Legislatura para este jueves a las 10 horas.

Desde la banca legislativa del Partido Obrero en el Frente de Izquierda – Unidad, a través de Amanda Martín y Gabriel Solano, fue presentado un proyecto de declaración de rechazo a la medida, que responde a las exigencias de quienes nada tienen para ofrecerle al pueblo trabajador, a las mujeres, a la juventud y las infancias. En el Partido Obrero, la Unión de Juventudes por el Socialismo y Tribuna Docente somos parte de la primer línea de batalla en la defensa de la educación pública.