Este miércoles 5 de agosto se realizó la asamblea virtual de estudiantes del terciario Simón Bolívar, convocada por la Lista Roja-UJS Terciarios frente a la completa inacción de la actual conducción del Centro de Estudiantes y una Dirección del terciario adicta a las políticas de recorte que padece la provincia. Con la presencia activa de compañeres de los distintos profesorados que componen el terciario más grande de la provincia, se llevó adelante una extendida y franca deliberación, que puso de manifiesto el sinnúmero de dificultades que se presentan en esta cursada virtual forzada por la pandemia.

Con las intervenciones de los compañeres de Inglés, Lengua, Matemática, Historia, Geografía y Química se pudo clarificar la crítica situación que atraviesa el conjunto de les estudiantes frente a la falta de condiciones materiales que garanticen las clases y el alcance a la totalidad de les estudiantes. Un ejemplo que refleja estos problemas son quienes transitan el último año de las carreras, que sin la realización de sus prácticas docentes no pueden recibirse; éstas se llevan adelante de manera virtual y en términos desiguales, expulsando a les compañeres que carecen de los aparatos tecnológicos y/o de conectividad.

También es importante destacar el esfuerzo que reflejaron en sus intervenciones muchas de las compañeras trabajadoras que tienen hijos a cargo y que hacen lo imposible para mantener la doble cursada: la suya y la de sus hijos. En el mismo punto se inscribe la pérdida de ingresos sufrida en la cuarentena, que afecta en mayor medida a las jefas de familia. Como bien lo relató una compañera durante la asamblea: la nula respuesta por parte de la institución y del Estado, las está empujando a la deserción.

A este escenario se suma la sobrecarga de trabajos prácticos que abruma a les compañeres, sin el sustento de las clases, aislados y con precarios medios para llevarlos adelante. Asimismo, resaltaron que no tienen las devoluciones a tiempo, lo que también deja ver una saturación en les docentes, que envían y reciben trabajos por diferentes plataformas para adaptarse a las demandas de una virtualidad depredadora.

Otro aspecto que se señaló, para nada menor, es el hermetismo con el que se maneja la institución, que ha impulsado mesas de examen virtuales, en junio, a espaldas de la comunidad estudiantil. Avalados por una resolución expulsiva de la provincia, que excluye de las mesas especiales a estudiantes cuyos planes caducan, por ejemplo. No obstante, no han garantizado que las mesas ordinarias se efectúen. Algo, de mínima, absolutamente arbitrario que sumerge en un colador a les estudiantes condicionales, entre otros.

La primera conclusión que se extrae es que la educación a distancia no funciona bajo ningún punto frente a la enorme desigualdad social que se vive. Cualquier debate que se dé, sin contemplar las condiciones materiales de estudiantes y docentes, cae en saco roto.

Las resoluciones de la asamblea giraron en torno a las necesidades concretas de les estudiantes, entre ellas que se garanticen los exámenes de julio mediante los protocolos correspondientes, así como un doble turno especial para todos los perfiles que en éste figuran. Del mismo modo, exigimos la conectividad Wifi libre a cargo del gobierno, para estudiantes y docentes; tanto como la entrega de netbooks para todos los que las requieran y la apertura de las Becas Progresar para todos los que la necesiten. Asimismo, reclamamos un régimen especial para les estudiantes con hijes. Este pliego será impulsado tanto al Consejo Institucional y lo que allí compete, como a la Dirección General de Estudios Superiores (DGES).

Pese a distintas operetas que se desenvolvieron desde la conducción del Centro y la gestión, con macartismos burdos que buscaban disuadir esta instancia de deliberación, hemos dado un enorme paso en la organización de les estudiantes por la defensa de la educación pública. En este camino llamamos a reforzar la participación y la lucha a todes les estudiantes para que nadie se quede afuera del Simón.