Educación

25/6/2021

Córdoba: el gobierno no garantiza la educación virtual

Según estadísticas nacionales 1 de cada 10 estudiantes no han podido conectarse a clases en 2020.

Tras la llegada de la pandemia se implementó una virtualidad forzosa en el dictado de clases, que no se garantiza por quienes gobiernan. El gobierno de la provincia de Córdoba anunció la entrega de computadoras el año pasado que todavía no llegaron a lxs estudiantes.

Según el último informe sobre pobreza del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (Odsa) y Cáritas Argentina, solo el 11,7% de la niñez pobre tuvo la posibilidad de tener clases de manera virtual en 2020. Tales cifras vuelven a exponer a todas luces la letra muerta del decreto de virtualización. Un decreto, como es natural, no puede suplantar la realidad, y la realidad es que la brecha digital obliga a la improvisación de la comunidad educativa.

En ese sentido, uno de los medios más comunes en la virtualización forzosa ha sido la edición de cuadernillos y fotocopias con actividades domiciliarias que la docencia muchas veces debe costear de su bolsillo. Cabe señalar que las familias se exponen a circular para ir a retirar tal material cada semana.

En Córdoba, la disposición de regreso a clases presenciales en localidades de hasta menos de 30 mil habitantes se da frente a la ineficiencia de una virtualidad desfinanciada adrede por el gobierno de Schiaretti.

En el mes de mayo, desde Prensa Obrera, denunciamos que ni siquiera se concretará en los próximos meses la promesa que hizo la provincia de garantizar las computadoras a lxs estudiantes. Aun cuando la cantidad de equipos a distribuir es limitada. Además, voceros del mercado han dicho que la licitación de la compra de parte del Estado es poco confiable.

Este cuadro revela una situación desesperante que se vive: la vacunación va lentísima, la entrega de dispositivos e internet ni siquiera arrancó, lo único que corre a alta velocidad es el ensanchamiento de la brecha social y digital que respectivamente agrava las condiciones sanitarias y deja en la marginalidad de la tecnología actual a grandes franjas de jóvenes. Hasta que no se fuerce a los gobiernos a volcar el dinero sobre la mesa, la educación virtual o presencial no se garantiza.

En función de que esta realidad de hundimiento educativo pegue un giro de 180 grados, no se puede pasar de largo las luchas de la docencia contra las políticas antieducativas y antisanitarias que se desarrollan en varios distritos y que en algunos ya conquistaron suspender la presencialidad. como en Unquillo, Salsipuedes y Oncativo. Un plenario provincial de la docencia diseñó la perspectiva señalada.

Además, lxs estudiantes organizadxs por las organizaciones piqueteras independientes del Estado vienen haciendo lo propio con un plan de lucha, que contó con jornadas de movilización conmovedoras mediáticamente, como la que volvió a darse en Córdoba el día 18 de junio.

La agenda impulsada por la juventud del Polo Obrero y la UJS reclama la apertura y ampliación de becas, wifi libre y dispositivos de conexión. Estas herramientas constituyen lo básico, lo elemental para una educación virtual y así cuidarse de la pandemia descontrolada a la que nos condenan los gobiernos ajustadores.

En este cuadro, la juventud del Polo Obrero viene impulsando iniciativas y planes de lucha, organizando empadronamientos y llevando un planteo de organización a cada escuela. De este modo se solidifican los lazos de unidad de acción entre la docencia y estudiantes.

Otro de los reclamos más sentido es el de que se universalice el programa del Paicor, cuyo presupuesto el gobierno recortó alrededor de un 24%. La alimentación debe llegar a todo quien lo necesite, a diferencia de lo que sucede actualmente donde se denuncian hasta casos de niños que se desmayan en las escuelas por falta de comida.

La lucha por la conectividad la tomamos como parte del desarrollo de un programa de cuestionamiento integral de la sociedad capitalista en la que nos encontramos. Habiendo tantos avances tecnológicos hoy en día, resulta inaceptable que sean precisamente las jóvenes generaciones las que estemos privadas de los mismos. La libre posesión de los avances tecnológicos en manos de todxs lxs estudiantes es de importancia vital para la formación educativa. Solo lxs trabajadores podemos darle una salida a esta crisis.